MADRID.- Un "absoluto escándalo". Así califica Economistas frente a la crisis los comicios a la Junta de Gobierno del Colegio de Economistas de Madrid que se celebraron el pasado viernes y que dieron como vencedor a la candidatura Profesionales Independientes con 445 votos -el 5,48% del censo electoral-, seguida de Economistas Profesionales (362 votos) y de Economistas Progresistas con 327 votos. La tasa de abstención se elevó hasta el 86%.

El motivo principal para este calificativo es que, según denuncia Economistas frente a la crisis,  los resultados electorales han sido determinados por"una modalidad de votación no contemplada en los estatutos colegiales ni en ninguna norma subsidiaria: votos recolectados y entregados en mano por dos de las tres candidaturas que han concurrido.

Es decir, los votantes de las candidaturas de Profesionales Independientes, la ganadora, como de Economistas Profesionales, la segunda en cuestión, entregaron supuestamente su voto en la mano a representantes siendo esta una modalidad de voto no recogida en los estatutos. 

Según los datos aportados por Economistas frente a la crisis, 320 economistas acudieron a votar el día 6 de mayo mientras que 314 votaron por correo y otros 500 votos fueron recolectados en mano por las candidaturas profesionales que fueron registrados en el Colegio antes y durante el día de la votación e introducidos en las urnas.

Actitudes franquistas

Economistas frente a la crisis, que apoya la candidatura de Economistas Progresistas, considera que esta irregularidad, unida a otras tantas urdidas por la Junta de Gobierno saliente y por la Junta Electoral, muestra una actitud que puede ser calificada como “franquista”.

De esta manera, el colectivo considera que la Junta de Gobierno saliente y la Junta Electoral han logrado el objetivo de lograr una "una altísima abstención de un cuerpo electoral desinformado y desincentivado e influir fraudulentamente en el resultado electoral".

"El Colegio de Economistas de Madrid continuará siendo una institución degradada, mediocre e inane, al servicio de intereses opacos", denuncia Economistas frente a la crisis en un comunicado.