La compraventa de viviendas acentuó su caída en agosto hasta retroceder un 14,4% en tasa interanual, su mayor descenso desde enero de 2021, con lo que encadena siete meses consecutivos en negativo en un contexto marcado por la subida de tipos de interés y el consecuente encarecimiento de la financiación, aunque los analistas del sector apuntan que el volumen de operaciones todavía sigue por encima de los niveles prepandémicos.

Según la estadística publicada este martes por el Instituto Nacional de Estadística (INE), en agosto se contabilizaron 49.252 operaciones de compraventa.

Con respecto al mes anterior (julio), la compraventa se incrementó un 2%. De esta forma, en lo que va de año las transacciones acumulan una caída del 6,5%.

En septiembre, el Banco Central Europeo (BCE) subió los tipos de interés de referencia por décima vez consecutiva a un récord del 4,5%, el nivel más alto desde el lanzamiento del euro en 1999, con el fin de contrarrestar la persistente inflación, y aunque varios dirigentes monetarios han señalado que seguirán altos durante una temporada, también han sugerido que no continuaran subiendo.

Tras cerrar diciembre con una bajada superior al 10%, las caídas de las compraventas se interrumpieron en enero al registrar una subida del 6,6%. En febrero volvieron a descender en la misma proporción, una tendencia que siguió en marzo con un ajuste del 5,7%, que se acentuó en abril con un recorte del 8,1%, que siguió en mayo y junio con el 6,4% menos, respectivamente, y que se volvió a agudizar en julio con un recorte del 10,5% y ahora en agosto con el 14,4%.

En agosto las compraventas de segunda mano, las más numerosas al representar casi el 81% del total, siguieron a la baja y registraron una caída del 15,9% con respecto al mismo mes de 2022, hasta contabilizar 39.827 transacciones. Se trata del mayor descenso que presentan desde enero de 2021.

Por su parte, las transacciones de vivienda nueva también se redujeron un 7,3% interanual hasta las 9.425 operaciones y presenta tasas negativas en nueve de los 12 últimos meses.

En el acumulado del año, las transacciones de vivienda usada se anotan una caída del 7,5%, mientras que aquellas de vivienda nueva moderan su descenso al 2%.

Desaceleración del mercado

El dato de agosto se suma a otras señales que apuntan a una notable ralentización del sector de la vivienda por el encarecimiento de las hipotecas, pero los observadores del sector apuestan por un aterrizaje suave, sin síntomas de la travesía del desierto que vivió el ladrillo español entre 2008 y 2013.

Según señala Idealista, el mercado está volviendo a sus cifras naturales y es posible que el año cierre en el entorno de las 600.000, por debajo de 2022 pero por encima de 2008, lo que demuestra que el mercado sigue funcionando y que los españoles siguen manteniendo su apetito por la compra de vivienda.

Fotocasa prevé que el año cierre con unas 530.000 compraventas y destaca que las cifras actuales superan en un 18 % a las de 2019 y que el 60% de compradores ya se han visto afectados por a subida de los tipos de interés y el 28% de ellos se han visto obligados a paralizar su compra.

Desde el Consejo General de los Colegios Oficiales de Agentes de la Propiedad agregan que aquellos que pueden retrasar la compra de una vivienda prefieren hacerlo y quedar a la espera de que la situación se estabilice y los tipos de interés dejen de subir. Además, la banca está tomando más precauciones a la hora de conceder préstamos hipotecarios, con el consiguiente enfriamiento de la demanda.

Pisos.com agrega que donde aún no es visible la desaceleración es en los precios y ve probable que esto empiece a observarse antes de finalizar el año en aquellos mercados que cuentan con una demanda más reducida.