El Sevilla es un equipo de extremos. Es capaz de mudar de piel de un día a otro hasta transformarse en un ser distinto de pies a cabeza a la versión anterior. Es también de extremos porque cuida a una especie en vías de extinción. En los verdes campos de su ciudad deportiva ha encontrado un hábitat idóneo para que los eléctricos hombres de banda se multipliquen. Allí se han adherido a la línea de cal Perotti, Navas y Capel. El trío destrozó una eliminatoria sin necesidad de un segundo acto.
Todavía quedan cosas por descubrir de Jesús Navas. Su historial despista. Lleva ya tanto tiempo con el 7 del Sevilla que da la sensación de ser un tipo que ya ha mostrado todo el fútbol que posee. Pero lo que delata que aún hay vetas por descubrir son su rostro y su DNI. Apenas 24 años de un jugador cada vez más maduro, al que cada vez le brotan más ramas para convertirse en un jugador todavía más frondoso.
Negredo, Renato y Navas marcan ante un equipo sin ideas
Tiene ya edad para decidir. Además de no perder sus habilidades, comienza a desarrollar una vertiente nuclear en un futbolista de cinco estrellas: ser decisivo. Ese jugador de banda chispeante y rumboso que se subía a un carro en marcha comienza ya a tatuar los partidos. Arañarlos hasta las mismas entrañas con un gesto. Anoche descuartizó al Deportivo con un soberbio pase a Negredo. Ni estaba en su sitio, ni parecía su especialidad, pero su toque desnudó a la defensa gallega. Fue lo mejor de una noche plomiza.
Ese instante fue la conclusión de una velada en la que el Sevilla le pilló las vueltas a los coruñeses. Empezó a ganar el encuentro por los costados, por la aceleración de sus dos atómicos. Navas y Capel metieron la cita en el acelerador de partículas. El baile abrazado que planteó el Depor se convirtió en un mambo cada vez que la pelota merodeó por las bandas.
Definitivamente, la Copa del Rey le sienta a las mil maravillas a Capel. El rubio se ha propuesto reivindicarse como futbolista los miércoles ante la falta de oportunidades los domingos. Fue decisivo en la ida ante el Barcelona y ayer cerró una hora de lo más interesante.
Los de Jiménez construyeron su superioridad desde las bandas
El Depor desperdició toda la primera parte. Le costó mucho hacerse con la pelota y llevarla con peligro hasta el campo contrario. Le faltó claridad de ideas. Bodipo peleó con sus armas para encontrar alguna jugada potable que llevarse al gañote.
Con más repertorio cuenta Perotti. Sus recortes son tan pronunciados como las curvas de una columna salomónica. Una de sus maniobras terminó con el partido tras un buen centro a Renato. Al minuto, Navas remató la noche y la eliminatoria.
¿Te ha resultado interesante esta noticia?
Comentarios
<% if(canWriteComments) { %> <% } %>Comentarios:
<% if(_.allKeys(comments).length > 0) { %> <% _.each(comments, function(comment) { %>-
<% if(comment.user.image) { %>
<% } else { %>
<%= comment.user.firstLetter %>
<% } %>
<%= comment.user.username %>
<%= comment.published %>
<%= comment.dateTime %>
<%= comment.text %>
Responder
<% if(_.allKeys(comment.children.models).length > 0) { %>
<% }); %>
<% } else { %>
- No hay comentarios para esta noticia.
<% } %>
Mostrar más comentarios<% _.each(comment.children.models, function(children) { %> <% children = children.toJSON() %>-
<% if(children.user.image) { %>
<% } else { %>
<%= children.user.firstLetter %>
<% } %>
<% if(children.parent.id != comment.id) { %>
en respuesta a <%= children.parent.username %>
<% } %>
<%= children.user.username %>
<%= children.published %>
<%= children.dateTime %>
<%= children.text %>
Responder
<% }); %>
<% } %> <% if(canWriteComments) { %> <% } %>