El Barcelona comienza esta noche en el Camp Nou su particular camino hacia Wembley. Estadio mítico para la hinchada culé, aunque tras su remodelación en 2007 más allá del emplazamiento apenas guarde parecido con el campo en que Alexanko levantó la primera Copa de Europa del club catalán hace ya casi dos décadas. 'Estaré contento si nos clasificamos para octavos', dijo ayer Guardiola. La afición, en cambio, no olvida que en las celebraciones del curso pasado, el técnico y sus hombres, impactados por no haber alcanzado la final del Bernabéu, asumieron la cita de Wembley como una deuda con el barcelonismo.

Hoy visita el Camp Nou el Panathinaikos, campeón griego (20.45 h. La 1). Un equipo que hace gala de una defensa férrea y una contra demoledora. Con Cissé y Govou, recién fichados del Olympique de Lyon, como principales argumentos ofensivos.

A pesar de que, a priori, el Barçaes favorito, su sorprendente tropiezo ante el Hércules en Liga mantiene al vestuario azulgrana en alerta. Lejos de enfadarse, Guardiola hizo ayer una defensa acérrima de sus futbolistas. 'Si esperáis que yo dude de este equipo lo lleváis claro. Puede que hagamos la peor temporada de la historia, pero ni así dudaré de estos jugadores. Imposible. Podía dudar del equipo cuando empecé, incluso el año pasado, pero después de conseguir cinco títulos y sumar 99 puntos en la Liga es imposible que yo dude de ellos. Estos jugadores son un espectáculo', proclamó de forma apasionada, para luego recordar los tímidos silbidos que el sábado recibió en el Camp Nou Iniesta al servir mal un córner.

El técnico argumentó que la derrota ante el Hércules no fue producto de la desidia de su equipo. 'Nos faltó ajustar un par de matices ofensivos'. Y confía en que con un poco de tiempo el Barça coja el tono.

Ante la posibilidad de que sus rivales sigan el ejemplo del Inter y se cierren atrás en el Camp Nou, Pep apuntó: 'Parece que el único fútbol válido es el nuestro. Yo no he inventado nada, sigo un legado. Y el fútbol del Hércules o el Madrid es tan bueno como el nuestro'.