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Fallece Marie France Pisier, una musa de la Nouvelle vague

La actriz francesa aparece sin vida en la piscina de su casa

PUBLICO.ES /EFE

2011 está siendo un año de despedidas para los amantes del séptimo arte. Después de los fallecimientos de Liz Taylor y Sidney Lumet, ahora le ha tocado el turno a la actriz francesa Marie France Pisier, una de las musas de la Nouvelle Vague. La intérprete gala, descubierta por François Truffaut, se convirtió en habitual de otros directores de culto como Luis Buñuel, Jacques Rivette, Alain Robbe-Grillet y en particular André Téchiné.

Como el protagonista de El Crepúsculo de los dioses, el cuerpo de la actriz apareció flotando en una piscina, tenía 66 años. Igual que en el cine clásico, la justicia francesa ha abierto una investigación después de que su marido encontrase el cuerpo de Pisier de madrugada en la pileta privada de su hogar, en la localidad de la Costa Azul donde vivían, Saint Cyr sur Mer. La fiscalía de Tolón ha precisado que ello no significa que la muerte fuera resultado de ninguna acción criminal.

La actriz tenía previsto asistir a Cannes para ver un documental sobre Jean-Paul Belmondo

Varios de sus allegados han destacado que la actriz no había dado signos de depresión y tenía múltiples planes. Entre ellos estaba su presencia en el Festival de Cannes en mayo por la presentación de un documental sobre su amigo el actor Jean-Paul Belmondo.

Nacida el 10 de mayo de 1944 en lo que entonces era la Indochina francesa, comenzó su carrera de actriz a los 17 años, gracias a Truffaut, que buscaba a una joven sonriente para su cortometraje Antoine et Colette, estrenado en 1962.

Volvió a trabajar diecisiete años más tarde con el mítico director en El amor en fuga, el último capítulo de la serie del personaje Antoine Doinel, en cuya escritura del guión ella misma colaboró.

Truffaut hizo de Pisier un símbolo del cine de autor, y a ella recurrieron Robert Hossein en La mort d'un tueur, Luis Buñuel en El fantasma de la libertad, Jacques Rivette en Julie y Céline van en barco o Alain Robbe-Grillet Trans Europ Express.

Pero fue sobre todo con André Téchiné con el que más trabajó y con quien logró su consagración definitiva, gracias a sus papeles en Recuerdos de nuestra Francia, Barocco y Las hermanas Brontë.

En 1976 obtuvo el premio César al mejor papel secundario por su trabajo en Cousin, cousine, de Jean-Charles Tacchella, y al año siguiente como actriz principal por Barocco.

Había participado en 1968 en las revueltas estudiantiles junto con el que era entonces su pareja, el líder del movimiento Daniel Cohn-Bendit. Más adelante estuvo casada con Georges Kiejman, uno de los abogados de más renombre de Francia.

Al conocerse la noticia de la muerte, se han sucedido en Francia las reacciones en el mundo del cine y también de la política: El jefe del Estado, Nicolas Sarkozy, ha dicho sentir tristeza y ha añadido que ella tenía 'la suprema elegancia que nace de la más perfecta simplicidad'.

El ministro de Cultura, Frédéric Mitterrand, ha lamentado la desaparición de 'una mujer de carácter cuyo encanto y juego tan sutil han marcado el cine francés'.

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