El jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, inicia junto a una delegación empresarial un viaje que le llevará a Astaná (Kazajistán) y San Petersburgo (Rusia) para respaldar la presencia española en estos países con grandes proyectos energéticos y de infraestructuras en marcha.

Destacan en el Ejecutivo la importancia de este periplo cuando las exportaciones se han convertido en uno de los motores del todavía débil crecimiento económico, por lo que también participarán en la delegación responsables de CEOE, CEPYME y las Cámaras de Comercio.

Según las fuentes del Gobierno, en Rusia se cerrarán acuerdos empresariales por 800 millones de euros: Repsol suscribirá uno con Alliance Oil Company para la explotación de campos petrolíferos; Talgo firmará un convenio con Ferrocarriles de Rusia para la venta de material rodante; y Gestamp, de componentes para el automóvil, prevé un acuerdo con el Gobierno de la provincia de Leningrado.

En Astaná, Repsol, Técnicas Reunidas e Indra también firmarán sendos convenios de cooperación con empresas kazajas del sector energético y de la defensa.

Otro de los ejes centrales del viaje será la participación de Zapatero en el Foro Económico Internacional de San Petersburgo, que clausurará junto al primer ministro ruso, Dmitri Medvédev, y donde defenderá las reformas puestas en marcha por España para sentar las bases de un crecimiento sostenido.

El presidente comenzará el viernes su agenda en la capital kazaja con entrevistas con el primer ministro, Karim Masínov, y con el presidente, Nursultán Nazarbáyev, el único que ha conocido esta exrepública soviética en sus casi veinte años de independencia.

Desde el Gobierno subrayan el interés de ampliar las limitadas relaciones comerciales con este país emergente exportador de gas y petróleo, donde en estos momentos hay empresas españolas con una cartera de inversiones de 800 millones de euros.

Zapatero presidirá con el primer ministro kazajo una reunión empresarial en la que participarán quince compañías españolas interesadas en los ambiciosos proyectos de infraestructuras energéticas, de transporte y de tecnologías de la comunicación.

Espera además el Ejecutivo que durante esta visita entre definitivamente en vigor el acuerdo alcanzado en 2009 para facilitar el tránsito de equipos y personal militar español a través de su territorio con destino a Afganistán.

La visita a San Petersburgo se enmarca en el Año dual España-Rusia 2011, ya que España es país invitado del Foro Económico Internacional que se celebra en esa ciudad que visitaron los Reyes en febrero.

La vicepresidenta primera, Elena Salgado, y el ministro de Industria, Miguel Sebastián, participarán también en el Foro que organiza la que ya es la undécima potencia económica mundial.

Zapatero se reunirá con Medvédev y tendrá ocasión de analizar asuntos como el reciente veto ruso a los productos hortofrutícolas europeos y las reticencias de su país a la operación militar contra el régimen libio de Muamar el Gadafi.

No obstante, las fuentes del Ejecutivo recalcan el marcado carácter económico de esta escala, en la que se organizará un encuentro con participación de veinte grandes empresas españolas y sus aliadas rusas.

El objetivo del Gobierno es mejorar el elevado déficit comercial actual, ya que las importaciones desde Rusia rondan los 6.000 millones de euros (5.000 en productos relacionados con el gas y el petróleo) y España exporta a ese país alrededor de 2.000 millones, cifra que se ha duplicado en los últimos seis años.

Las empresas españolas, según los datos del Ejecutivo, están interesadas en importantes concursos y licitaciones relacionadas con las infraestructuras energéticas y del transporte.

El pasado mes de marzo Moscú decidió además volver a incluir a España en el listado de países en los que los fondos rusos pueden comprar deuda soberana, del que había sido excluida temporalmente en noviembre, junto a Irlanda, por no cumplir sus exigentes requisitos.