Alberto Contador recibió ayer un apoyo inesperado. El de José Luis Rodríguez Zapatero, el presidente del Gobierno, quien, como aficionado al deporte y a partir de su formación jurídica (es profesor en Derecho Constitucional), tras leerse con atención los informes del caso, aseguró que no hay motivo alguno para castigar al ciclista español. "No hay ninguna razón jurídica para sancionar a Contador", declaró a Público ayer, según informa Gonzalo López Alba.

Contador sigue pendiente de conocer el fallo definitivo del Comité de Competición de la Federación Española de Ciclismo por su positivo por clembuterol en el pasado Tour. El comité emitió el pasado 26 de enero una propuesta de sanción por un año para el corredor, que se quedaría así sin el triunfo en el Tour 2010. Aunque la pena que marca la normativa para los positivos por clembuterol es de dos años, el comité no la aplicó con rigidez y la redujo a uno en su propuesta al no advertir intencionalidad del ciclista y valorar sus pruebas aportadas.

Contra dicho dictamen, Contador presentó hace un par de días nuevas alegaciones, basadas en el artículo 296 del reglamento antidopaje, que exime de responsabilidad al deportista en caso de no quedar probada su negligencia.

Contador dio positivo en varios controles antidopaje del pasado Tour de Francia. El 21 de julio aparecieron en su orina 50 picogramos de clembuterol, sustancia expresamente prohibida, de las llamadas cualitativas; es decir, que su simple aparición ya determina un positivo al margen de su cantidad. El campeón español alegó desde el primer día que la sustancia procedía de un solomillo contaminado, comprado en Irún, que sólo consumieron con él alguno de sus compañeros del Astana, los que al día siguiente no tuvieron que someterse a un control antidopaje.

Contador declaró ayer a Efe que en su propuesta de sanción "tuvo mucho peso" la presión ejercida por la Unión Ciclista Internacional y la Agencia Mundial Antidopaje, y que su caso se ha politizado "desde hace tiempo".

El comité, cuyo veredicto se espera inminente, tiene una nueva opinión sobre la mesa. La de Zapatero.