El español Maverick Viñales (Aprilia) se ha adjudicado su cuarto triunfo de la temporada y el segundo consecutivo al imponerse en el Gran Premio de la Comunidad Valenciana que se ha disputado en el circuito "Ricardo Tormo" de Cheste, en donde el también español Nicolás Terol (Aprilia) se ha proclamado campeón del mundo de 125 c.c.

Terol cierra la historia de una categoría, la de los 125 c.c. que se llevaba disputando desde el principio del campeonato del mundo, cuando en 1949 se instauró la competición y que la próxima temporada dará paso a la nueva Moto3, para motos de cuatro tiempos y hasta 250 c.c.

En el momento de la salida no defraudó el autor del mejor tiempo de entrenamientos y el británico Danny Webb (Mahindra) se puso líder de la prueba, en tanto que a su estela se colocó Héctor Faubel (Aprilia) y Maverick Viñales (Aprilia), con Johann Zarco (Derbi), que salía desde la primera línea, que se vio superado por varios rivales, lo que no era un buen presagio para él y sí para el español Nicolás Terol en la lucha por el título.

Al término de la primera vuelta Webb era líder pero llevaba tras su estela a Héctor Faubel, que no tardó demasiado en superarlo para intentar escaparse, con lo que se lograba un doble objetivo, pues la escudería valenciana de Jorge Martínez "Aspar" lograba la victoria y también el título mundial, cuarto de su equipo de 125 c.c. tras conseguir los de Álvaro Bautista, el húngaro Gabor Talmacsi y el también español Julián Simón.

La presión fue demasiada para el francés Johann Zarco, que veía como por delante se escapaban sus rivales y por ello intentó tirar en unas condiciones de la pista que no eran las más apropiadas y en la tercera vuelta se produjo el error y cayó cuando marchaba en quinta posición.

Zarco se fue por los suelos -esta es la primera vez en toda la temporada que no acaba una carrera- intentando superar a otro rival y el error lo pagó con la retirada mientras que a "Nico", avisado desde la línea de taller, ya le bastaba cualquier resultado, pero desde la octava posición que ocupaba en ese momento comenzó a remontar posiciones y apenas tres vueltas después ya era sexto.

En cabeza de carrera Héctor Faubel imprimió un ritmo a la prueba que no pudieron seguir sus rivales inicialmente y que le permitió ponerse a más de segundo y medio del trío formado por el español Maverick Viñales y los alemanes Sandro Cortese (Aprilia) y Jonas Folger (Aprilia) en la séptima vuelta.

Terol libre ya de toda preocupación por el título mundial se relajó y comenzó a sacar lo mejor de sí como piloto. Ya era campeón del mundo, pero ¿que mejor manera de celebrarlo que sobre el podio?

Así debió pensar Terol, que acabó enlazando con Jonas Folger, último integrante del grupo de delante, en la octava vuelta.

Inalcanzable Héctor Faubel, todo el interés de la carrera estuvo centrado en la pelea del grupo perseguidor y en saber si Terol sería capaz de poder celebrar su título mundial desde alguno de los peldaños del podio de la Comunidad Valenciana, el circuito que le vio nacer y dar sus primeros pasos como piloto.

Y se consumó el objetivo de Terol, pues en la décima vuelta Terol vio como se iba por los suelos Sandro Cortese y casi a la par Viñales alcanzaba a Faubel.

La emoción iba "in crescendo" y Terol, que ya tenía en el punto de mira a la pareja de cabeza, forzó el ritmo hasta alcanzarlos tres vueltas después, en el decimotercer giro.

A diez vueltas del final, en el decimocuarto giro, Terol ya era líder de la carrera, seguido por Viñales y Faubel y ya con el resto de pilotos muy descolgados.

Además de ponerse líder, Terol intentó marcharse de sus rivales y en el decimosexto giro marcó una vuelta rápida que dejaba claras sus intenciones de intentar escaparse de sus rivales para consolidar la su novena y última victoria del campeonato del mundo de 125 c.c. y de su trayectoria deportiva en la cilindrada, pero en la siguiente sus contendientes respondieron en idéntica medida.

Pero en el tramo final de la carrera Viñales y Faubel volvieron al ataque y Terol, que por encima de todo quería estar en el podio, dejó hacer a sus oponentes a la espera de algún fallo.

Así, Viñales se destacó y Faubel no pudo seguir su ritmo, lo que aprovechó Terol para colocarse segundo y garantizarse su presencia en el podio como flamante campeón del mundo.

Por Juan Antonio Lladós