El responsable europeo de la industria pesquera propuso el viernes endurecer la normativa de la UE para luchar contra la pesca ilegal, a la que se hace responsable de reducir drásticamente los caladeros, mediante la imposición de un sistema de puntos de sanciones similar al de las infracciones de tráfico.

El comisario de Pesca de la Unión Europea, Joe Borg, que se ha quejado a menudo de que los controles existentes son inadecuados, propuso intensificar los controles con inspecciones, supervisiones y exigencias de trazabilidad para la industria pesquera.

Muchas especies de las aguas europeas, especialmente el bacalao y la merluza, se han visto muy diezmadas durante años a causa de la sobrepesca y algunas están en grave peligro de desaparecer totalmente.

por ejemplo, si se utilizan redes de malla pequeña para coger más peces, o se faena en temporada de veda - los titulares de las licencias de pesca podrían perder su derecho a pescar en aguas de la UE, con periodos de suspensión de seis meses y después de 12 meses.

"El control y el cumplimiento de las normas debería ser la piedra angular de la Política de Pesca Común. En lugar de eso, es nuestro talón de Aquiles", dijo Borg en una rueda de prensa.

El actual sistema, que data de 1993 y se ha reformado más de una docena de veces, es ineficiente, caro y demasiado complejo, dijo, y es hora de asegurarse de que 'los que violen las reglas no obtengan beneficios de sus acciones ilícitas'.

A pesar de una inversión de 400 millones de euros al año en controles pesqueros, la UE tiene aún unos datos poco fiables de las capturas de peces, dijo la Comisión Europea.

Los ministros de Pesca de la UE tendrán que aprobar nuevas medidas antes de que estas puedan entrar en vigor.

El sistema de puntos se aplicará a los barcos pesqueros, y a los capitanes y oficiales de la tripulación. Los delitos se compulsarán en un registro de puntos en el país de procedencia del barco.

Las nuevas normas se aplicarán a los barcos de la UE aunque estos pesquen fuera de las aguas europeas. También afectarán a los barcos que no sean de la UE pero que operen dentro del bloque. Sin embargo, cualquier acuerdo bilateral existente sentará precedente.

Borg también propuso hacerlo obligatoria para países de la UE en la inspección de los desembarcos de pesca, en el procesamiento, transporte y marketing, así como en la supervisión de criterios como la capacidad de pesca de un barco y su potencia de motor.

Si un país vulnera las reglas, las ayudas de la UE se pueden reducir o suspender, las cuotas anuales verse reducidas e incluso prohibir la pesca en sus aguas, dijo Borg.

Con la propuesta de Borg, los inspectores de la UE podrían inspeccionar barcos fuera de sus aguas nacionales, y los funcionarios de un país podrían inspeccionar los barcos de otro. En la actualidad, sólo cada país puede inspeccionar su propia flota pesquera.