El nuevo presidente de CEPYME, Jesús Terciado, cree que tanto la organización que ahora lidera como la propia CEOE han salido reforzadas tras las elecciones que le dieron la victoria al frente de la patronal de las pymes el pasado día 15.

Durante una entrevista con EFE, Terciado contrapuso su candidatura "en positivo" con la del anterior presidente, Jesús Bárcenas, que planteó su campaña como un "plebiscito" contra el líder de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, como único argumento.

Para Terciado, la candidatura de Unidad Empresarial, que él encabezó, rechazó entrar en enfrentamientos y buscó la integración de los territorios y las organizaciones, algo que desde su punto de vista ha sido determinante para lograr la victoria.

Terciado afronta ahora un mandato en el que quiere subrayar el valor de CEPYME como uno de los integrantes del diálogo social aunque, eso sí, dentro de la CEOE y bajo el liderazgo de Díaz Ferrán.

Eso no impedirá, en su opinión, que CEPYME sea independiente y defienda los intereses de las pymes y sus problemas, sobre todo el que más le preocupa, la falta de crédito.

En la entrevista, Terciado subrayó que el papel de la organización que preside es "imprescindible" en el diálogo social y achacó la "debilidad" que ha mostrado la organización en el proceso no a su falta de representatividad, sino a la actitud de su anterior presidente.

"Estoy absolutamente convencido de que CEPYME es esencial y de que el conocimiento del 98,5% de las empresas en España -que son pymes- lo tenemos nosotros", sentenció Terciado, para quien es su organización la que tiene que representar a las pymes y defender sus intereses.

Un compromiso para el que asegura contar con el propio Díaz Ferrán, quien ha apoyado la candidatura de Terciado y desde un primer momento, aseguró éste, le ha encargado "deberes" para que le presente propuestas e iniciativas para las pymes.

Es a Díaz Ferrán y a la "gran organización madre" de la CEOE a la que Terciado trasladará sus inquietudes "en lugar de buscar confrontaciones".

En su nueva labor, Terciado aseguró a EFE que quiere hacer de CEPYME una organización más "plural, democrática y participativa" en la que mejoren también los servicios que se prestan a los socios.

Insistió no obstante en que lo que más le preocupa el la falta de crédito para las pequeñas y medianas empresas.

"Las pymes tienen un problema fundamental de financiación y de liquidez, derivado de una escasez de crédito por un lado y de la morosidad por otro", recordó Terciado, quien ilustró con datos este problema: de las 330.000 empresas que cerraron en 2009 el 25% los hicieron arrastradas por la morosidad.

Para Terciado, hay que reforzar los instrumentos de crédito y el papel las sociedades de garantía recíproca, algo en lo que los gobiernos y las entidades financieras "pueden ayudar mucho".

Advirtió además de que es necesario mejorar la credibilidad de España en el exterior con los ajustes fiscales, la reforma laboral o la de las pensiones, para que cuando dicha credibilidad aumente las entidades financieras "tengan al final liquidez suficiente" para prestar a las empresas.

"Y si esa liquidez que tienen (las entidades) no es para financiar el déficit o la deuda de las administraciones públicas, sino para la inversión productiva, será mucho mejor, esa es la principal dificultad y el principal reto que tenemos que afrontar", concluyó.

Jesús Terciado también quiere que mejoren las posibilidades de internacionalización, sobre todo para las medianas empresas.

Recordó en este sentido que los programas de internacionalización se han hecho hasta ahora desde la CEOE y no desde CEPYME, y quiere que su organización también se implique en ellos, además de proponer una especie de "consejo de internacionalización" que sirva para buscar cauces de colaboración con otros mercados.

En la entrevista, Terciado reconoció que el camino hasta la Presidencia de CEPYME ha sido difícil, como lo fueron las negociaciones para unir su candidatura a la que encabezaba el miembro del Comité Ejecutivo de Confemetal Antonio Garamendi, al que apoyaban muchos sectores.

Admitió que la negociación con Garamendi no fue fácil y que el propio Díaz Ferrán se implicó en ella, pero al final, dijo, se consiguió una candidatura fuerte y de integración.

Preguntado por el hecho de que Confemetal pidiera en su momento la dimisión de Díaz Ferrán, aseguró que nunca ha oído a ninguno de los representantes de esa organización hacer dicha reclamación, y se mostró convencido de que tanto Garamendi como el resto de Confemetal ahora apoyan al presidente de la CEOE.