'Yo tenía una granja en África, al pie de las colinas de Ngong'. Así empieza Lejos de África, la autobiografía novelada de Karen Blixen de sus años en Kenia y que sirvió de base al guion de la película de Sydney Pollack. Desde el primer momento que se proyectó en las pantallas de todo el mundo se convirtió en un éxito del cine. Y del turismo.

Pocos filmes habrán tenido, en la historia, un impacto mayor en la industria de los viajes. De repente, decenas de miles de personas querían conocer esos paisajes, esas personas, esa fauna salvaje. La película supuso un antes y un después en el turismo de Kenia, y la onda expansiva se extendió a los países cercanos, sobre todo a Tanzania.

Más allá de lo evidente, de los safaris en busca de leones, elefantes, rinocerontes y jirafas, la película despertó el interés por el personaje central, Karen Blixen, un personaje femenino que despertaba admiración y respeto.

Y, de repente, los viajeros empezaron a visitar barrios de Nairobi que nunca antes habían recibido el menor interés. El destino preferido de los que buscan a Karen Blixen es, por supuesto, esa granja al pie de las colinas de Ngong, que ahora forma parte de la red de museos nacionales de Kenia. La casa se encuentra en el barrio de Karen, algo apartado del centro de Nairobi (en el libro la autora afirma que estaba a 12 millas de la ciudad lo que es un poco exagerado). Este barrio Karen se levanta en la que fue la finca de los Blixen, que fue dividida en parcelas después de su venta y marcha a Dinamarca, por lo que los alrededores de la casa no tienen ningún parecido con el de la época, 80 años atrás.

La casa pasó por muchos dueños y diferentes usos, y en el momento del rodaje de la película era la residencia del director de una escuela cercana. La mayoría de las escenas fue rodada en un decorado construido al efecto, pero al visitarla es posible viajar en el tiempo a la época descrita en el libro y la película.

Desde algunas de las habitaciones de la casa se distingue la silueta de las colinas de Ngong, en la que destacan cuatro picos, como los nudillos de una mano cerrada, o como cuatro olas gigantescas de color azul oscuro. Estas colinas -que son reverenciadas por los masaai- tan cercanas de Nairobi eran un excelente lugar de paseo, con vistas que se extendían hasta el valle del Rift. Lamentablemente muchos de sus visitantes, tanto nacionales como extranjeros, fueron víctimas de robos y asaltos, por lo que hay que consultar las condiciones del momento antes de iniciar el paseo. En otras colinas cercanas a Nairobi abundan todavía las plantaciones de café, a la que se dedicaban los Blixen.

Lo que los seguidores de Karen Blixen no perdonan es una visita a la tumba de Denis Finch Hatton -el personaje de Robert Redford. Está bastante cerca, hacia el este, de Point Lamwia, una de las colinas. Es fácil ir en taxi desde Nairobi o desde Karen, y se la encuentra por un obelisco levantado a su lado. Hay una lápida con un verso de La oda del viejo marinero, de Coleridge: 'Reza mejor quien mejor ama; a todo: hombre, ave o bestia'.