Un total de 1.145 personas pidieron asilo en España en el primer cuatrimestre de 2009 frente a las 1.609 del mismo periodo del año anterior, lo que supone un descenso de cerca del 30 por ciento.

El presidente de la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR), Javier de Lucas, ha presentado hoy un informe sobre "La Situación de las personas refugiadas en España", con datos de 2008, que refleja la "crisis" del derecho de asilo en este país.

Un problema que, en su opinión, se recrudecerá con el proyecto de nueva Ley de Asilo que será debatido en el pleno del Congreso el próximo jueves.

Del total de solicitudes, sólo el 43,32 por ciento fueron admitidas a trámite, un porcentaje similar al del primer cuatrimestre de 2008, cuando 61 personas obtuvieron el estatuto de refugiado frente a las 72 que lo han logrado en el mismo periodo de este año.

Los países de origen de un mayor número de solicitantes de asilo son Nigeria, con 185 personas -231 en el mismo periodo de 2008-; Costa de Marfil, con 160 frente a 184, y Colombia, 92 frente a 402.

De Lucas ha negado que el proyecto legislativo recupere la vía diplomática, es decir, la posibilidad de pedir asilo en embajadas y consulados, como sostienen los miembros de la Comisión de Interior del Congreso, que ratificaron el dictamen de la ponencia.

Ha denunciado "la desaparición de la vía diplomática, pese a lo que se ha dicho" por parte de los representantes políticos, ya que lo único que se recupera en el nuevo texto es la "facultad discrecional" de los embajadores y representantes consulares de dotar de un visado a quien ellos consideren oportuno.

Tras valorar mejoras como que se garantice la presencia de ACNUR en todas las etapas del proceso de solicitud así como la intervención de las ONG, De Lucas ha denunciado que se reduzca el ámbito de asilo, excluyendo a los solicitantes de países comunitarios.

También ha censurado que la Ley incrementa las causas de exclusión bajo la cláusula de "país seguro", que es "inadecuada a la realidad" y "viola el derecho universal" e "individual" de cualquier persona a solicitar asilo.

El presidente del CEAR ha asegurado que la normativa amplia los plazos de detención en la frontera además de incluir excesivos supuestos para proceder a ella.

"Como valoración global, pensamos que le falta adecuación a los nuevos desafíos y valentía para sostener posiciones que puedan ser un ejemplo en la Unión Europea y no al revés", ha enfatizado De Lucas, quien ha lamentado que el derecho de asilo queda reducido a un "mínimo inaceptable".

El presidente de CEAR ha pedido al Gobierno que deje la "cicatería", ante un mundo en el que crecen los conflictos, y aproveche la Presidencia de turno de la Unión Europea para "hacer avanzar" el derecho de asilo en el conjunto de la organización comunitaria.

Mauricio Valiente, coordinador del Informe, ha reprochado a los países de la UE que utilicen la crisis económica "para cerrarse más", mediante un conjunto de "prácticas disuasorias" que llevan a que los emigrantes renuncien a pedir refugio.

A su juicio, se está "sacrificando" el derecho de asilo en aras a la "eficacia" en el control de la inmigración clandestina en las fronteras.

Del informe se desprende que un total de 4.517 personas pidieron asilo en España en 2008, un 41 por ciento menos que el año anterior, de las cuales la mitad no fueron admitidas a trámite y sólo 151 obtuvieron el estatuto de refugiado.

Otras 126 personas consiguieron otro tipo de protección, frente a las 340 del año 2007, lo que supone una reducción del 62 por ciento.

Del total de solicitudes presentadas obtuvieron algún tipo de protección un 5,34 por cien, un 3 por ciento menos que en 2007.

En total son 277 concesiones de protección, unas cifras que, ha señalado el presidente de CEAR, desmienten la supuesta avalancha de peticiones y no justifican las "restricciones" que contempla la nueva Ley.