Los parlamentarios socialistas han defendido hoy la utilización del simbólico puño en alto en los actos de su partido como una de las "señas históricas de identidad" del PSOE y de sus 125 años de historia, después de que el líder del PP, Mariano Rajoy, les haya criticado por hacer este gesto en Rodiezmo.

El portavoz del grupo parlamentario socialista, José Antonio Alonso, ha mostrado hoy su asombro por que el Partido Popular se preocupe "de estas cosas" en lugar de hacerlo por el país y ha remarcado que el PSOE es un partido "de libertades" con mucha historia y unas "señas de identidad claras".

Por ello, ha explicado que para algunos esas señas históricas se "visualizan" con el gesto del puño en alto, que sin embargo otros socialistas no emplean, pero en cualquier caso unos y otros están unidos por los mismos ideales.

La senadora Matilde Fernández ha considerado "normal" que a Rajoy no le guste que los socialistas alcen el puño por "todo lo que hay detrás de la Internacional y de esos símbolos".

Según ha dicho tras asistir a la reunión plenaria del grupo socialista en el Senado, "para nosotros es la imagen de una coordinación entre trabajadores e intelectuales luchando por una sociedad más justa" y por ello ha proclamado: "Eso se hace con una letra, con un puño en alto y con mucha alegría".

En parecidos términos la secretaria de Política Internacional y Cooperación del PSOE, Elena Valenciano, ha defendido el "puño con rosa, pacífico, de libertad y no de guerra, que forma parte de un ritual que debería respetarse", y ha remarcado que este símbolo no tiene "nada que ver" con el saludo fascista.

Sin embargo, los dirigentes del PP han insistido en la reprobación de Rajoy, para quien el PSOE debería mirar "al futuro" en vez de "levantar el puño" como hicieron los socialistas el domingo pasado en la fiesta minera de Rodiezmo (León) mientras cantaban la Internacional.

La portavoz del grupo popular en el Congreso, Soraya Sáenz de Santamaría, ha asegurado compartir las declaraciones de Rajoy, y ha agregado que "curiosamente, a la vez que en Rodiezmo levantaban el puño, (los socialistas) le pegaban un puñetazo a las clases medias y los trabajadores subiendo los impuestos y no adoptando ninguna medida para generar empleo".

"Yo les pediría coherencia", ha concluido.