La satisfacción ha sido general por la detención, hoy, de Radovan Karadzic, líder de los serbios de Bosnia y uno de los presuntos criminales de guerra más buscados por la justicia internacional.

Karadzic, en fuga desde hace 12 años, ha sido conducido ante el juez de instrucción de la sala de Crímenes de Guerra del Tribunal de Belgrado.

El gabinete del presidente serbio, Boris Tadic, ha indicado en un comunicado que "Karadzic ha sido encontrado y está en prisión".

Según las autoridades de Belgrado, Karadzic ha sido detenido en una operación de los servicios de seguridad serbios.

El fiscal general del Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia (TPIY), Serge Brammertz, ha dicho que la detención de Karadzic "demuestra claramente que nadie está fuera del alcance de la ley".

"Tarde o temprano, todos los fugitivos serán traídos a la justicia", ha dicho el fiscal en una declaración, en la que ha añadido que "éste es un día muy importante para las víctimas, que han esperado este arresto durante una década".

El jefe de la diplomacia europea, Javier Solana, ha felicitado al Gobierno serbio por haber dado "un paso muy importante de acercamiento a Europa" con la captura de Radovan Karadzic.

"Karadzic debe comparecer ante el Tribunal de La Haya, teniendo un juicio justo", ha afirmado Solana con "gran satisfacción" por la noticia de la captura, según ha explicado su portavoz, Cristina Gallach.

A su juicio, la detención ha sido "un acto muy importante del Gobierno serbio que acaba de ser elegido" y "un paso muy importante también de acercamiento a Europa", ya que la colaboración con la justicia internacional es una de las condiciones impuestas a Belgrado para su futura adhesión.

El presidente de Francia, Nicolás Sarkozy, ha celebrado hoy la detención de Radovan Karadzic y ha considerado que muestra la voluntad del nuevo Gobierno de Serbia de acercar a ese país a la Unión Europea.

Sarkozy ha acogido con "mucha satisfacción" la detención de Karadzic, ha indicado el Elíseo en un comunicado, en el que se recalca que "este arresto, aguardado desde hace mucho tiempo, manifiesta claramente la voluntad del nuevo Gobierno de Belgrado de acercar a Serbia a la Unión Europea, contribuyendo a la paz y la estabilidad de los Balcanes".

El presidente de EEUU, George W. Bush, también ha felicitado al Gobierno serbio por la detención de Karadzic.

"Felicitamos al Gobierno serbio y damos las gracias a las personas que llevaron a cabo esta operación por su profesionalidad y valentía", ha señalado Bush en un comunicado difundido por su portavoz, Dana Perino.

Para EEUU, la detención de Karadzic es una "importante muestra" de la determinación del Gobierno serbio de cooperar con el Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia (TPIY)", según la Casa Blanca.

Washington considera además que el momento de la detención, que se produce unos días después de la conmemoración de la masacre de más de 7.000 varones musulmanes de Srebrenica, "es particularmente apropiado, dado que no hay un mejor tributo a las víctimas de atrocidades de guerra que llevar a los responsables a la justicia".

El antiguo Alto Representante para Bosnia Paddy Ashdown ha afirmado que la detención de Radovan Karadzic es "una obra de justicia" muy importante para Bosnia y para el mundo en su conjunto.

En declaraciones a la BBC, Ashdown ha destacado que es un "avance significativo para Serbia, para los Balcanes y para la Justicia".

El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, ha destacado tras la detención de Karadzic la "determinación del nuevo Gobierno serbio para conseguir la plena colaboración" con el Tribunal Penal Internacional para la Antigua Yugoslavia.

Dicha colaboración es una de las condiciones impuestas a Serbia para su futura adhesión al club comunitario, por lo que la captura del serbobosnio "es muy importante para sus aspiraciones europeas", ha remarcado Barroso en un comunicado.