La reconstrucción de Haití debe empezar de inmediato, incluso antes de que la comunidad internacional se ponga de acuerdo en un plan para refundar el devastado país, dijo el sábado el primer ministro, Jean-Mary Bellerive.

De lo contrario, el país corre el riesgo de reeditar viejos problemas sociales, económicos y políticos que agravarían la situación vigente, advirtió.

"La refundación tiene que empezar hoy mismo", dijo Bellerive al señalar que la decisión del Gobierno del presidente René Préval es llegar a la cumbre que se celebrará en Nueva York el 31 de marzo con la consigna de que "venimos a pedir ayuda para seguir trabajando".

Bellerive participa de la reunión de misiones técnicas de Haití y Republica Dominicana, que el sábado iniciaron el diseño de un plan para reconstruir el país, devastado por el poderoso terremoto de hace poco más de un mes.

El plan será presentado ante el grupo de naciones donantes, entre los que están Japón, Estados Unidos, Francia, Canadá y la Unión Europea, en una reunión en Santo Domingo el 17 y el 18 de marzo que luego serán llevadas a la cumbre convocada por Naciones Unidas en Nueva York.

Al ilustrar la situación de Haití, el primer ministro señaló que en enero pasado la recaudación fiscal fue un 10 por ciento de lo proyectado, lo que significa apenas un 50 por ciento de lo que se necesita para pagar los salarios de los funcionarios.

"Pagamos los salarios del mes, pero si seguimos en esta situación vamos a tener inflación y todos los problemas que conlleva la pérdida del control de las normas macroeconómicas, generando problemas sociales y políticos", advirtió Bellerive.

"Eso no podemos permitirlo, junto al socorro humanitario tenemos que consolidar los esfuerzos por la democracia en Haití", agregó.

RESPUESTA RAPIDA PARA HAITIANOS

Bellerive dijo que como primer ministro su preocupación en estos momentos es una respuesta rápida a la población haitiana, especialmente aquella que está en la calle, para que no se politice la situación reinante.

Planteó que uno de los puntos esenciales del encuentro con técnicos dominicanos encabezado por el ministro de Economía, Temístocles Montás, es qué tipo de respuesta se puede dar ahora mismo y qué se puede plantear de manera conjunta con la comunidad internacional para abordar la tragedia haitiana.

"Ni Haití, ni nosotros podemos darnos el lujo de dejar que el tiempo pase y que no haya una respuesta rápida de la comunidad internacional para iniciar la refundación de Haití", dijo Montás.

Reveló que las agencias de cooperación internacional han expresado su preocupación ante la posibilidad de que se retrase el proceso de reconstrucción y se originen situaciones ya vividas en otras naciones como en Nicaragua tras el paso del huracán Mitch.

El retraso de unos tres años en la reconstrucción de Nicaragua obligó a muchos nicaragüenses a tener que emigrar, recordó Montás, pero advirtió, además, que en el caso de Haití un retraso similar causaría, además de migraciones masivas, problemas políticos y económicos.

"Tenemos que hacer un gran esfuerzo en lograr que no en seis meses, sino que en los próximos dos o tres meses se pueda tener algo concreto para que en Haití esa fase de la reconstrucción, que es una fase muy importante en lo que será la refundación de este país, se pueda iniciar", dijo Montás.

"Si eso no se hace se van a crear problemas políticos y problemas sociales, que yo sé que las autoridades de Haití no quieren que ocurran", agregó.