La prensa egipcia informa en grandes titulares de la destitución del Gobierno, del toque de queda y del fracaso de la policía para mantener la seguridad, mientras que artículos de opinión elogian el valor de los manifestantes.

El diario gubernamental Al Ahram, el de mayor tirada en Egipto, titula con grandes letras rojas: "Destituido el Gobierno", en un artículo que incluye un resumen con los principales temas tratados por el presidente Hosni Mubarak, en el poder desde 1981, en su discurso de anoche.

"Imponen el toque de queda en El Cairo, Alejandría y Suez. Mueren 18 personas y cientos resultan heridos" y "Las fuerzas políticas participaron en las manifestaciones", son otros de los titulares de la primera página del rotativo.

En este diario, el prestigioso columnista egipcio Anis Mansur, elogia a los jóvenes que han participado en las manifestaciones en su columna de contraportada, titulada "Posiciones".

"Oh jóvenes vuestro mensaje ha llegado y el Estado lee y analiza, por lo que es preciso que encuentre una solución y que reciba la colaboración de todos", dice Mansur.

El columnista se refiere a las exigencias de los jóvenes y asegura que son "correctas" porque hay muchos problemas en el país.

"Los jóvenes -continúa- exigen justicia, libertad, igualdad, un pan para cada boca, un asiento para cada estudiante y una cama para cada enfermo. (...) Los jóvenes piden limpiar el país de los ladrones corruptos que roban los fondos del pueblo".

Por su parte, el diario independiente Al Masry Al Youm, sale también con un gran titular rojo: El último llamamiento: Salven a Egipto".

"Imponen el toque de queda en El Cairo, Alejandría y Suez", "El Ejercito sale a las calles después de que la policía fracasara en afrontar la Revolución de los manifestantes", son otros de los titulares.

Mientras, un artículo del periódico, también de primera plana, advierte que "Egipto está parado actualmente sobre brasas de fuego, y espera una actuación sabia que apague las llamas que se han inflamado (...) por la tensión que invadió y movilizó a todos".

Las protestas políticas contra el régimen de Mubarak vivieron ayer su jornada más sangrienta, que forzó al presidente a decretar el toque de queda.