El atleta sudafricano Oscar Pistorius iluminó el martes la última tarde de los Paralímpicos, con una contundente victoriaen los 400 metros, logrando su tercera medalla de oro en los Juegos de Pekín.

El deportista de 21 años, cuyas piernas fueron amputadas a la altura de la rodilla cuando era un bebé, quería competir en los Juegos deagosto pero, a pesar de ganar la disputa legal contra la Federación Internacional de Asociaciones de Atletismo (IAAF por sus siglas eninglés), no logró clasificarse.

Pistorius, que ya se había impuesto en las categorías de 100 y 200 metros en las pruebas para atletas con discapacidades, llegó con 10metros de ventaja a la meta, marcando un record mundial de 47,49 segundos, en una noche lluviosa en el estadio del Nido.

"No me sentía muy bien al salir esta noche así que estoy extremadamente contento con esta carrera. Fue la última carrera de losParalímpicos", dijo el atleta sudafricano.

"Tres medallas de oro y un record mundial es un sueño hecho realidad, esta es la competición más memorable de mi vida. Lo pasé muybien, el público estuvo tan apasionado", agregó. "Estoy apuntando hacia ambos (los Juegos y los Paralímpicos) de Londres".

Pistorius, que corre con la ayuda de prótesis de fibra de carbono fabricadas en Islandia, comenzó a competir con atletas sin discapacidaden 2007.

La IAAF prohibió en enero su participación en competiciones contra atletas sin minusvalía porque estimó que sus piernas artificiales ledaban una ventaja injusta.

Sin embargo, el Tribunal de Arbitraje del Deporte (TAD por sus siglas en francés) levantó la prohibición en mayo y aunque el atleta noacudió a Pekín en agosto, está ahora centrado en clasificarse para la prueba de 400 metros de los Juegos de Londres en 2012.

"Estoy apuntando hacia ambos (los Juegos y los Paralímpicos) de Londres", dijo.

"Voy a trabajar más duro", aseguró. "La próxima temporada es realmente importante...intentaré lograr un tiempo de clasificación para elcampeonato mundial de Berlín".

Los Juegos Paralímpicos de Pekín concluyen el miércoles.

/Por Nick Mulvenney/