El papa Benedicto XVI dijo hoy que sin capacidad para perdonar, los fieles no pueden acercarse "dignamente" a la Eucaristía, ya que no es posible comunicar con el Señor "si no comunicamos entre nosotros".

El Pontífice así lo manifestó durante la misa que ofició en la catedral de Albano, localidad de la provincia de Roma, cercana a la residencia papal de Castel Gandolfo, donde bendijo el nuevo altar tras unas obras de restauración.

Tras afirmar que el amor de Cristo "es la energía espiritual que une a los que participan en el sacrificio y se nutren del único Pan para la salvación del mundo", el Pontífice se preguntó si es posible comunicar con Dios "si no nos comunicamos entre nosotros" y presentarse ante el altar "divididos, lejanos los unos de los otros".

Según el Papa, "es indispensable" la reconciliación fraterna "para presentarse dignamente ante el altar".

"Que cada vez que os acercáis al altar para la celebración eucarística se abra en vosotros el ánimo de perdonar y la reconciliación fraterna y estéis dispuestos a aceptar las excusas de todos los que os han herido y estéis dispuestos a perdonar", auspició.

Tras la visita a Albano, el Papa regresó a Castel Gandolfo para el rezo del ángelus, durante el que hizo un llamamiento a la ONU para que se adopten y se apliquen "con valentía" las medidas necesarias para erradicar la pobreza extrema, el hambre, la ignorancia y el flagelo de las pandemias, "que afectan sobre todo a los más pobres".

El Papa recordó que el 25 de septiembre se celebrará en la sede de la ONU, en Nueva York, una reunión para verificar el cumplimiento de los objetivos de la declaración del Milenio y tras el llamamiento aseguró que un compromiso de ese tipo producirá grandes beneficios "tanto para el desarrollo de las naciones que necesitan ayudas del exterior, como para la paz y el bienestar de todo el planeta".