Al menos cuatro supuestos insurgentes han muerto en una operación de una fuerza conjunta de las tropas afganas e internacionales en la provincia central afgana de Ghazni, informó hoy el mando de la OTAN, mientras vecinos de la zona denunciaron que las víctimas eran civiles.

En un comunicado, la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF) precisó que la operación tuvo lugar anoche en el distrito de Qarabagh y tenía como objetivo la captura de un dirigente talibán supuestamente responsable de ordenar ataques contra las tropas internacionales.

"Las fuerzas conjuntas se enfrentaron a insurgentes mientras registraban un recinto y les mataron", afirmó la organización en la nota.

Según la versión de la ISAF, las tropas "protegieron" durante la operación a 11 mujeres y 24 niños, pero acabaron con la vida de un joven "de unos 15 años" que mostró una actitud "hostil" y "tomó el arma de un soldado".

"Fue disparado y abatido", indicó la organización, que también informó de la detención de un insurgente durante la operación.

Sin embargo, el jefe del distrito de Oarabagh, Muhibullah Khpelwak, dijo a Efe que unas 150 personas transportaron hoy hasta su oficina los cadáveres de cuatro personas y denunciaron que las tropas internacionales habían acabado con la vida de civiles.

Khpelwak no pudo confirmar si las víctimas son civiles o miembros de la insurgencia pero se comprometió a investigar el incidente.

Grupos de manifestantes salieron a las calles para mostrar su protesta por la supuesta muerte de civiles en la operación, quemaron neumáticos y cortaron la carretera que une Kabul con la ciudad meridional de Kandahar.

En Afganistán, donde hay desplegados unos 110.000 soldados extranjeros, mueren cada año varios miles de personas víctimas del conflicto que enfrenta a los talibanes contra las tropas internacionales y el Ejército regular afgano.