La moda masculina del verano 2013 vislumbró hoy el mundial de fútbol brasileño de 2014 con el modisto Gustavo Lins, vistió a la mafia del futuro con el irano-alemán Boris Bidjan Saberi y revivió las relajadas vacaciones de la alta burguesía catalana en manos del británico Stuart Vevers para Loewe.

Estas fueron algunas de las variadas experiencias indumentarias de la tercera jornada de colecciones de París, en la que una decena de firmas mostraron sus ideas, entre ellas también Krisvanassche, John Galliano, Comme des Garçons Homme Plus, Juun J. y Berluti.

El brasileño Gustavo Lins regaló uno de los momentos exquisitos del día, con un desfile atípico organizado al aire libre, en el patio del Palacio de Sauroy, en el que el público descubrió y aplaudió en pie su estilo personalísimo.

Gustavo Lins, que saludó al final balón en mano, adelantaba en parte su nueva colaboración con el grupo brasileño de ropa deportiva "Penalty", cuyas primeras creaciones se ofrecerán a partir de abril y mayo de 2013, según dijo a Efe.

El modisto enlazó esas piezas deportivas sobre zapatillas de piel con la elegancia de una silueta parisina, de hombre trajeado o casual, audaz y discreto a la vez. Siempre sofisticado.

Pantalones de punto con cinta lateral de piel, camisas estructuradas con costuras acompañando los músculos y chaquetas reversibles con hombreras deconstruidas, fueron elementos claves en esta colección de básicos que su artífice quiso "muy concentrada" y "fácilmente combinable".

Llevado por la tesis de que "en verano necesitamos menos ropa que en invierno", Lis creó tres tipos de pantalones, tres tipos de chaquetas, dos camisas, unos pocos jerséis de punto, alguna gabardina y alguna corbata, resumió.

Hubo, por supuesto, bermudas, en su caso deportivas, a veces combinadas con camiseta verde vivo, pero fundamentalmente el hombre Gustavo Lins vestirá pantalones largos también en verano, en ciertos casos bastante ajustados, en otros más anchos y confortables.

Gris, verde vivo y azul vivos, negro, gris, beige, marrón y azul muy claro y blanco rayado fueron sus colores.

El modisto británico Stuart Vevers presentó hoy su línea masculina para Loewe directamente inspirada en la elegancia "cálida y relajada de las vacaciones de la alta burguesía en la Costa Brava" y en la visita que el actor Gary Cooper hizo a Madrid en los años cuarenta del siglo XX.

Según las notas entregadas a la prensa, la visión del genial Pablo Picasso trabajando en su estudio completó la exploración Vevers de las raíces españolas de Loewe y de cómo puede ser un verano 2013 de máxima elegancia y distinción.

Para ello, intentó equilibrar modernidad y tradición, prendas prácticas y únicas a la vez, como una ligerísima chaqueta "de artista" de ante y napa cerrada con corchetes metálicos, o una cazadora de manga raglan y cuerpo de cocodrilo.

Otras prendas especiales son un cardigan de punto de lana merino y diversos trajes sastre de lana y seda, todo ello en tonos neutros y marrones, tostados, piedra, oro y arena, con algunos detalles de naranja, amarillo y azul.

"Mucho más serio que otros años", según sus propias palabras, Boris Bidjan Saberi, instalado en España desde hace ya años, dijo en un casi perfecto castellano haber estudiado "las mafias de todo el mundo" para preparar su nueva colección.

"Me hago mayor y en esta colección me apeteció mucho ser yo mismo, un poco mas serio, menos provocador", no para ser más comercial, sino para hacer lo que le gusta, y de ahí surgió una colección con "mucho blanco, mucho negro y mucho gris", declaró a Efe.

"Mi colección es en realidad la mafia del futuro, mi mafia. Tampoco voy a entrar en políticas, porque no va por ahí, es una pura estética" que le da "fuego para crear una colección", señaló.

Lola Loscos