El brasileño Felipe Massa (Ferrari) se redimió de un mal inicio de temporada con una rotunda victoria en el Gran Premio de Bahrein, por delante de su compañero, el finlandés Kimi Raikkonen, nuevo líder de un Mundial de Fórmula Uno en el que el español Fernando Alonso (Renault), décimo, no pudo sumar punto alguno por primera vez este año.

Massa, que no pudo acabar ni en Australia ni en Malasia, lo que dio pie a continuos rumores sobre su continuidad en Ferrari, se impuso hoy por segundo año consecutivo en el circuito de Sakhir.

En su sexta victoria como piloto de Fórmula Uno, el brasileño, cuya última victoria la logró el año pasado en Turquía, ganó por delante de Raikkonen, actual campeón mundial, y el polaco Robert Kubica (BMW Sauber), que no pudo hacer valer la primera 'pole' de su carrera en la máxima categoría.

Por detrás cruzaron la línea de meta, en la zona de puntos, el alemán Nick Heidfeld, con el segundo BMW Sauber, el finlandés Heikki Kovalainen (McLaren-Mercedes), el italiano Jarno Trulli (Toyota), el australiano Mark Webber (Red Bull-Renault) y el alemán Nico Rosberg (Williams-Toyota).

Alonso, con un coche que no daba para nada más, sólo pudo ser décimo, el mismo puesto que ocupó en la formación de salida. Tras sumar cinco puntos en Australia y uno en Malasia, el español se quedó hoy por primera vez fuera de la zona de puntos.

Tras esta carrera, Raikkonen pasa a comandar el Mundial de pilotos con 19 puntos, tres más que Heidfeld y cinco por delante del británico Lewis Hamilton (McLaren-Mercedes), sin puntos hoy tras acabar decimotercero y doblado; Kubica y Kovalainen.

El bicampeón mundial español consiguió ganar dos plazas en la arrancada, pero poco después cayó a la novena en unos primeros compases de carrera en los que incluso una embestida por detrás de su ex compañero Hamilton.

El inglés, que ocupó el tercer puesto en la salida, se quedó clavado en la parrilla al abrirse el semáforo, y en su posterior intento por rebasar a Alonso ante de completarse el primer giro le tocó a éste en la rueda trasera derecha. En el impacto Hamilton perdió el alerón delantero. Tuvo que regresar al garaje para sustituirlo, lo que lo hundió irremisiblemente en el fondo del pelotón.

Tras el incidente, en el que Alonso sólo sufrió ligeros daños en el alerón trasero, Alonso se mantuvo noveno con el acoso del alemán Timo Glock (Toyota), que acabó por rebasar al español en el primero de los repostajes de éste. La inferioridad mecánica de Alonso le impidió en todo momento luchar por evitarlo.

Luego Alonso volvió a pugnar con Glock por la novena plaza, pero tras la segunda parada del español la lucha desapareció. Incluso en los compases finales, a falta de 10 vueltas, el brasileño Rubens Barrichello (Honda) aprovechó los problemas de sobreviraje de Alonso para colocarse a su estela, pero el asturiano supon aguantar la presión hasta el final.

Massa fraguó su triunfo en una gran salida que le permitió llegar a la primera curva por delante de Kubica. Raikkonen tardó poco en superar al polaco de manera brillante en una de las enlazadas.

Los dos pilotos de Ferrari, en un intercambio de vueltas rápidas, comenzaron a poner tierra de por medio, sobre todo el brasileño, mientras el finlandés aguantaba a Kubica. Los bólidos rojos sellaron con autoridad el primer doblete de la temporada de la Scuderia.

Hamilton perdió el mando en el campeonato después de terminar decimotercero a una vuelta de Massa. El inglés pagó caro su mañana salida y su toque con Alonso. El año pasado se puso líder del campeonato en esta carrera, y en esta ocasión tratará de olvidar cuanto antes su paso por el circuito de Sakhir.