Los reyes de España, políticos, autoridades y víctimas conmemoraron el domingo el Día de las Víctimas del Terrorismo e invocaron a la unidad contra la violencia, cuando se cumplen 50 años de la primera muerte a manos de ETA.

El Congreso de los Diputados abrió sus puertas para ser testigo de la primera ocasión en que se celebra este homenaje, después de que el pasado 11 de marzo, sexto aniversario de los atentados islamistas contra cuatro trenes en Madrid, se declarara oficialmente el 27 de junio como Día europeo en recuerdo de las Víctimas del Terrorismo.

"Este es un día para reiterar la más firme condena y repulsa a la violencia terrorista y reafirmar nuestra determinación de erradicarla de la faz de la tierra", dijo el rey Juan Carlos durante su discurso en la Cámara, después de que todos los asistentes guardaran un minuto de silencio.

El monarca, que aseguró que la unidad de todas las fuerzas democráticas para luchar contra la violencia es una "exigencia" de la sociedad, agregó que "el terrorismo es perverso, cobarde e injustificable".

Previamente, el presidente del Congreso, José Bono, tuvo palabras de afecto para las víctimas y sus familias.

"Os debemos una proclamación de unidad, que este hemiciclo hoy evoca", afirmó, para pasar a insistir también en la necesidad de unidad de todos los partidos políticos.

"En materia de lucha antiterrorista, señorías, todos a una, ni un regate de más, ni un paso de menos", agregó.

El tributo coincide con los 50 años del primer asesinato de ETA, ocurrido el 27 de junio de 1960, cuando la banda armada acabó con la vida de Begoña Urroz, una niña de 22 meses, en San Sebastián.

Al acto acudieron personalidades como la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, la presidenta del Tribunal Constitucional, María Emilia Casas, el presidente del Senado, Javier Rojo, o el líder del Partido Popular, Mariano Rajoy, además de familiares y representantes de las víctimas.

"Esto le otorga el máximo valor simbólico y de memoria y representa a toda la sociedad española que está a favor y protegiendo la dignidad de la víctimas, pero también enfrentándose a cualquier forma de fanatismo", dijo la presidenta de la Fundación Víctimas del Terrorismo, Maite Pagazaurtundua, hermana del concejal asesinado por ETA Joseba Pagazaurtundua.

ETA es responsable de la muerte de más de 800 personas desde el comienzo de su campaña a favor de la independencia de territorios tradicionalmente vascos, no sólo en el norte de España, sino también en el suroeste de Francia.

La presidenta de la Asociación 11-M Afectados de Terrorismo, Pilar Manjón, dijo que consideraba un "honor" el hecho de que se hubieran unido todas las instituciones del Estado por este motivo.

Los atentados del 11 de marzo de 2004 en Madrid causaron la muerte de 191 personas después de que doce mochilas bomba explotaran en cuatro trenes de cercanías de la capital.