Andrew Conley, un joven estudiante de Indiana en EEUU, no muestran ningún gesto de arrepentimiento al confesar ante la policía que mató a su hermano de 10 años de edad inspirándose en el personaje protagonista de la serie de televisión Dexter. A pocos metros de las dependencias policiales, su madre y su padre reciben las dolorosas condolencias de sus allegados, ante el féretro abierto de su hijo asesinado.

El joven de 17 años de edad será juzgado como un adulto en el tribunal de Ohio, aunque su abogado ha presentado una declaración de no culpabilidad en su nombre. La muerte del muchacho ha dejado consternados a los residentes de la pequeña ciudad de Ohio River, a 90 kilómetros al sureste de Indianápolis, al conocer los detalles del suceso.

Según aseguran los fiscales, Andrew confesó a los investigadores que estranguló a su hermano Conner después de pelearse con él la noche del pasado domingo. Después, condujo su cuerpo a un parque, donde se deshizo del cadáver. 'Lo hizo para satisfacer su ansia de matar', apuntan. Después, el joven al que sus vecinos describen como 'agradable y normal' acudió a la comisaría de policía, confesando haber matado a su hermano. En su declaración, Andrew describió cómo estranguló a su hermano menor, satisfaciendo un deseo 'como cuando tienes muchas ganas de comer una hamburguesa'. Señaló a los agentes que se sentía como el asesino de la serie televisiva Dexter.

Mientras se abre el proceso judicial en Ohio, en EEUU se han alzado voces que culpan a las ficciones televisivas de muchos de estos actos, mientras sicólogos expertos aseguran que 'esto no es debido a un programa de televisión, es indicativo de una perturbación grave'. En diferentes entrevistas, antes de conocerse el suceso, responsables de la serie de ficción, que se emite en el canal Showtime de la CBS desde hace cinco temporadas, aseguraban que una de sus preocupaciones era que personas desequilibradas tomaran como ejemplo al personaje interpretado por el actor Michael C. Hall.