La tasa española de inflación armonizada -medida igual en todos los países de la zona euro- se situó en abril en el 1,6 por ciento, lo que supone un aumento de una décima con respecto a la de marzo y el sexto registro positivo consecutivo interanual.

Así lo refleja el indicador adelantado del Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) difundido hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE) que, de coincidir con la inflación general (IPC), que se conocerá el 14 de mayo, también supondrá el sexto mes con tasas interanuales positivas de inflación.

Hasta que se conozcan los datos definitivos, todo apunta a que el principal responsable del aumento de la tasa de inflación continúa siendo la evolución del precio de los carburantes, ya que hace un año el barril del Brent costaba 51,39 dólares de media frente a los 85,55 dólares de media en lo que va de abril este año.

Según el INE, el descenso de los precios de los viajes organizados también influyeron en la tasa del IPCA de abril.

La subida histórica del precio de los carburantes hizo que la tasa del IPC en julio de 2008 se elevase al 5,3%, pero en agosto de ese mismo año los precios, medidos en tasa interanual, comenzaron a moderarse hasta alcanzar registros negativos por primera vez en marzo de 2009.

El IPCA mide los precios de forma armonizada con el resto de países de la zona del euro, y hasta el próximo 14 de mayo cuando se conozca el IPC general, el INE no dará el dato definitivo que, normalmente, no suele variar en más de una o dos décimas.

El INE elabora este indicador para incorporarlo al cálculo del índice adelantado del IPCA en toda la zona del euro y lo difunde Eurostat, con el objetivo de ofrecer datos equiparables a los que se elaboran en Estados Unidos.

El indicador adelantado se calcula utilizando la misma metodología que la que se emplea para evaluar el IPC, con la salvedad de que para el primero se hace una estimación de los datos de los que aún no se dispone en el momento de la publicación.