El incendio que comenzó en Cicouro (Portugal) y llegó hasta el municipio de Alcañices, en la provincia de Zamora,  ha bajado a nivel 1 después de que las llamas ya no supongan una amenaza para la población y se haya restablecido el tráfico en la carretera nacional N-122.

Las labores de extinción del personal de Medio Ambiente, además de la bajada de las temperaturas y el aumento de la humedad que se produce durante la noche, ha permitido que las llamas ya no supongan un peligro para la población, han informado este viernes fuentes de la Consejería de Fomento.

El incendio comenzó en la tarde del jueves en Cicouro y posteriormente pasó a España, donde han trabajado para sofocar las llamas medios de los gobiernos de Castilla y León y central.

En concreto, más de 130 personas han participado en las labores para apagar el fuego, apoyados por ocho helicópteros, cinco aviones, cinco buldozer, tres autobombas y la Unidad Móvil de Meteorología y Transmisiones del ministerio.

La Dirección General de Protección Civil y Emergencias, a petición de la Comunidad Autónoma solicitó la presencia de la UME en la zona, tras declararse el nivel 2 de emergencia, y su participación ha seguido lo establecido en el Protocolo de Intervención de la Unidad Militar de Emergencias.

Una sección del quinto Batallón de Intervención en Emergencias (BIEM V), con sede en la Base 'Conde de Gazola' de San Andrés de Rabanedo (León), se ha desplazado hasta el municipio zamorano de Alcañices para colaborar en las labores de extinción del incendio forestal.

Seis bomberos portugueses resultaron heridos, dos de ellos de gravedad, y su fue coche calcinado en este incendio, informaron las autoridades portuguesas.