Garikoitz Ibarlucea Murua, requerido por España por su implicación en actos de violencia callejera en el País Vasco entre 2001 y 2002, compareció hoy por videoconferencia ante el tribunal de Westminster en Londres, en una vista de rutina.

El acusado se limitó a confirmar su identidad, en cumplimiento de la legislación británica, que requiere la comparecencia de los procesados cada cuatro semanas.

El juez Quentin Purdy dispuso que Ibarlucea, detenido el pasado 14 de marzo en esta capital, comparezca nuevamente ante la corte, a través de videoconferencia, el próximo 9 de julio.

Posteriormente, el 21 de julio se celebrará la audiencia de su extradición, en la que la fiscalía y la defensa expondrán sus argumentos y el caso podría quedar visto para sentencia.

Nacido en 1981 en Ibarra (Guipúzcoa), Ibarlucea fue detenido el 14 de marzo cuando trabajaba de cocinero en una tienda de productos orgánicos y, tras pasar a disposición judicial, permanece en prisión a la espera de que se resuelva su juicio.

El joven de 29 años fue detenido en virtud de una orden de arresto europea dictada por la sección primera de la sala de lo penal de la Audiencia Nacional española, con fecha del 10 de diciembre del 2007.

En ella se le acusa de un delito de pertenencia a organización terrorista y se le vincula con tres episodios concretos de violencia callejera en Guipúzcoa.

Ibarlucea fue detenido por la Guardia Civil en octubre del 2002 por participar en esos y otros actos violentos, pero se encontraba huido desde el 2006, cuando no se presentó al juicio por estos hechos en la Audiencia Nacional.