Por Kate Kelland y Genevra Pittman

Las cadenas de comida rápidadeberían entregarles a sus clientes estatinas gratis para"neutralizar" los efectos cardíacos del consumo de comidasgrasosas como las hamburguesas y las papas fritas, según unequipo del Reino Unido.

Las estatinas están entre los fármacos más utilizados paratratar y prevenir la enfermedad cardíaca y los infartoscerebrales, que son las principales causas de muerte en elmundo.

En un estudio publicado en American Journal of Cardiology,científicos del Instituto Nacional del Corazón y los Pulmonesdel Imperial College de Londres, calculó que la reducción delriesgo de desarrollar enfermedad cardíaca que proporciona unaestatina podría compensar el aumento de ese peligro que generael consumo de una hamburguesa y un licuado.

"Las estatinas no contrarrestan todos los efectos dañinosde una hamburguesa con papas fritas. Es mejor evitar la comidacon grasa. Pero observamos que, en cuanto a la posibilidad desufrir un infarto, tomar una estatina reduce el riesgoindividual más o menos tanto como la comida rápida lo aumenta",dijo el doctor Darrel Francis, que dirigió el estudio.

"Cuando las personas toman conductas riesgosas, como fumaro conducir un automóvil, sienten la necesidad de tomar medidasque minimicen los riesgos, como usar el cinturón de seguridad oelegir cigarrillos con filtro. Tomar una estatina es una formaracional de reducir los riesgos que produce el consumo decomidas con grasa", añadió Francis.

Aun así, Peter Weissberg, director médico de la FundaciónCardíaca Británica (BHF), opinó que la idea de Francis nodebería tomarse tan literalmente. Instó a la población aconcentrarse en una buena alimentación y hacer ejercicio paracuidar el corazón.

"Las estatinas son una medicina vital para personas conenfermedad coronaria o con alto riesgo de desarrollarla. No sonuna bala mágica", dijo Weissberg.

Un estudio publicado en junio en Archives of InternalMedicine sugirió que las estatinas no les salvan la vida apacientes sin enfermedad coronaria, aunque podrían preveniralgunos infartos no fatales.

Al doctor Franz Messerli, director del Programa deHipertensión de dos hospitales de Nueva York, St. Luke's yRoosevelt, le preocupó el mensaje para los consumidores dehamburguesas.

"La entrega gratuita de estatinas a los amantes del cuartode libra les daría una sensación de falsa seguridad", dijoMesserli a Reuters Health.

Mientras que las estatinas podrían contrarrestar una partede los efectos de los alimentos con grasa en el colesterol, hayotros problemas que no puede resolver: "el contenido de sodioes alto, las fibras están ausentes y la carga calórica esgigante", expresó Messerli sobre la comida rápida queanalizaron los autores.

FUENTE: American Journal of Cardiology, online 12 de agostodel 2010