La secretaria de Estado de Educación, FP y Universidades, Montserrat Gomendio, ha dicho hoy que es "un momento de emergencia educativa" y que no caben dudas de la necesidad de "reformas profundas" para mejorar la calidad de la formación de los alumnos.

Gomendio ha añadido que el panorama educativo ofrece "unos índices inaceptables de abandono y fracaso escolar, desaliento en los profesores y tasas altas de abandono universitario", en la inauguración del IX Congreso Mundial de Educación de ACADE.

Para la secretaria de Estado reforma no solo consiste en modificar programas, currículos o las materias, "la reforma ha de ser más profunda, debe afectar a las personas a los educadores a lo implicar un cambio profundo en la cultura de la educación", y los docentes van a ser los protagonistas de la reforma educativa, ha dicho.

La prioridad es evitar que se mantenga la alta tasa de abandono temprano del sistema educativo y alcanzar el 10% previsto por la UE para 2020, y en este sentido se esta estudiando simplificar la diversidad de materias que pueden elegir los estudiantes, para concentrar su atención en aquellas materias consideradas fundamentales, ha dicho Gomendio.

Otro de los objetivos es permitir que los alumnos se adapten a diferentes trayectorias de acuerdo a sus capacidades, espectativas y a su nivel de esfuerzo, y por ello se va a adelantar la decisión entre estudiar el bachillerato y la formación profesional.

También es una prioridad "fundamental" una reforma de los estudios de Formación Profesional, que ahora sólo eligen un 30% de los estudiantes porque "la consideran una oferta poco atractiva", ha señalado Gomendio.

En este sentido se ha referido a una formación profesional dual, que permita que los estudiantes desarrollen una parte más importante que la que se realiza actualmente como práctica en las empresas, y ha apelado a la colaboración empresarial para que faciliten esta incorporación de los estudiantes para que se un primer paso en el mercado laboral.

El proyecto de mejora de la calidad educativa incluye un esfuerzo para mejorar el nivel de idiomas y en concreto el inglés, lengua en la que es necesario que los estudiantes adquieran la destreza suficiente para que sea un instrumento de trabajo, ha añadido.

La secretaria de Estado ha dicho que la reforma universitaria está basada en tres puntos esenciales: la búsqueda de la excelencia, la competitividad y la internacionalización, apostando por la especialización de las universidades en aquellas áreas del conocimiento en el que puedan ofrecer un producto del más alto nivel y lograr prestigio internacional y que atraigan a los mejores del mundo.

Ha recordado la creación por el Consejo de Ministros de la Comisión de expertos para tratar, en los próximos meses, de elaborar las propuestas para llevar a cabo la reforma que tanto necesita el sistema universitario español.