El Gobierno de Italia aprobó hoy el decreto con el que se reconoce la independencia de Kosovo, informó el presidente del Ejecutivo en funciones, Romano Prodi.

Prodi explicó que el reconocimiento fue aprobado por el Consejo de Ministros, con la excepción del titular de Solidaridad Social, Paolo Ferrero, que votó en contra, expresando el rechazo a la independencia de Kosovo de su partido, Refundación Comunista.

"Italia se ha alienado con la mayor parte de los países de la Unión Europea", explicó Prodi, que añadió que con Serbia seguirá existiendo una relación de "amistad" y se continuará apoyando el "acercamiento" de este país balcánico a la UE.

Por su parte, el ministro de Exteriores, Massimo D'Alema, explicó que se enviará próximamente una carta a las autoridades kosovares en la que se anuncia el establecimiento de "normales relaciones" diplomáticas.

Asimismo, anunció el próximo envío a Kosovo de un encargado de negocios, mientras se espera el nombramiento de un embajador.

D'Alema confirmó la permanencia de los 2.600 soldados italianos destinados en la zona y el próximo envío de funcionarios y magistrados italianos, en el marco de la misión civil aprobada por la UE.

El ministro explicó que Serbia ha sido informada de la decisión italiana de reconocer la independencia de Kosovo y se le ha asegurado que "no se trata de un gesto de hostilidad".

La Embajada serbia en Roma confirmó hoy la retirada de la embajadora Sanda Raskovic Ivic y el envío de una carta de protesta al Ministerio de Exteriores, en cuanto llegue la comunicación oficial del reconocimiento de la independencia de Kosovo por parte de las autoridades italianas.

El jefe de la diplomacia italiana ya explicó ayer que el reconocimiento de Kosovo era "útil y necesario", y añadió que este proceso tiene que realizarse "con sobriedad" y "continuar trabajando para mantener buenas relaciones con Serbia".