Los familiares de los 62 militares que perdieron la vida en el accidente del Yak-42, que se estrelló en 2003 en Trebisonda (Turquía), han anunciado hoy su intención de recurrir en el Tribunal Supremo (TS) el archivo de la causa que ha investigado las supuestas irregularidades en la contratación del avión.

Los abogados de las familias de los soldados han presentado hoy un escrito, al que ha tenido acceso Efe, ante la sección cuarta de la sala de lo penal de la Audiencia Nacional en el que anuncian que interpondrán recurso de casación en el TS contra la decisión de la sala de confirmar el archivo dictado el pasado 2 de febrero por el juez Fernando Grande-Marlaska.

Hace una semana, la Audiencia Nacional dictó un auto en el que rechazaba los recursos contra el archivo presentados por la asociación de familiares de los fallecidos, al que se había adherido la Fiscalía, aunque los magistrados ya advertían de que contra esa resolución no cabe recurso alguno.

No obstante, las familias de las víctimas han anunciado hoy su intención de interponer recurso de casación "por infracción de ley, quebrantamiento de forma e infracción de precepto constitucional".

Por esta causa llegaron a estar imputados por un delito de imprudencia grave con resultado de muerte seis mandos militares, entre ellos el entonces jefe de Estado Mayor de la Defensa, Antonio Moreno Barberá, y el exjefe de Estado Mayor Conjunto, Juan Luis Ibarreta Manella.

También se imputó al exjefe de la división de operaciones del EMACON, José Antonio Martínez, a los también miembros del EMACON Joaquín Yáñez y Alfonso Elías, y al teniente coronel Abraham Ruiz López, enlace de la División de Planes del Estado Mayor Conjunto ante la agencia de la OTAN NAMSA.

La Audiencia Nacional considera, como hizo Marlaska, que la actuación de los imputados no constituyó delito, ya que el Código Penal exige que "hubieran creado el riesgo mediante una acción u omisión precedente".

Asimismo, la sala avaló la instrucción de Marlaska y negó que el magistrado basara su decisión de archivar la causa únicamente en las conclusiones de la Comisión Internacional de Investigación, que concluyó que el accidente se debió a la fatiga y la falta de preparación de la tripulación.

Para los magistrados, el instructor practicó "todas y cada una de las diligencias solicitadas por todas y cada una de las partes personadas", apurando "al máximo" las posibilidades de investigar.

Mañana se cumplen nueve años del siniestro y los familiares afrontan esta fecha con la sensación de que han sido abandonados, que se ha ultrajado la memoria de las víctimas y que se sigue tapando la verdad para que nadie asuma responsabilidades, según han señalado.