Diez personas resultaron heridas leves el domingo al estallar un potente cochebomba junto a una comisaría de la Ertzaintza en la localidad vizcaína de Ondarroa, en un atentado en el que ETAbuscaba una masacre, según informó el consejero vasco de Interior, Javier Balza.

"No cabe duda que la voluntad era causar el mayor número de muertos posible", declaró Balza a periodistas en ellugar de la explosión.

Los presuntos miembros de ETA lanzaron cócteles molotov antes de hacer detonar el vehículo para atraer laatención de los agentes autonómicos y acercarles lo máximo posible al coche bomba, indicó a Reuters un portavoz dela Ertzaintza en Bilbao.

El coche, cargado con 100 kilos de explosivos en el maletero, fue colocado cruzado y con el maletero enfocadohacia la comisaría, para aumentar la acción de la bomba, según el Gobierno vasco. Aún se desconoce la composición.

"Han seguido el sistema básicamente igual que hicieron con el cuartel de la Guardia Civil en Legutiano", declaróBalza, en referencia al atentado que provocó la muerte del agente de la benemérita Juan Manuel Piñuel, el pasado 14de mayo.

El consejero vasco no quiso ofrecer muchos más datos, como por ejemplo el referente al número de personas queparticiparon en la colocación del coche bomba, para no perjudicar la investigación.

SIN AVISO

Entre los heridos que dejó la detonación, producida cerca de las 4.30 de la mañana, hay tres ertzainas y sietetranseúntes. Ninguno de los heridos estaba en estado grave, aunque la bomba dañó seriamente los edificios cercanos.

Al contrario de lo que suele ser habitual, el coche bomba de Ondarroa no fue alertado por ETA, que sí avisó de unatentado inminente en Vitoria, apenas unas horas antes.

A continuación, la Ertzaintza acordonó la zona antes de la explosión del coche bomba junto a la sede de la CajaVital en la capital vasca. No se registraron heridos, pero sí daños materiales, ya que el coche estaba cargado con entre82 y 100 kilos de explosivos.

"Parece ser que el coche bomba (...) estaba cerca del cierre y éste ha sujetado la onda expansiva y la ha echado haciaafuera, y eso ha facilitado afortunadamente que los daños sean menores", declaró a los medios de comunicación lasubdelegada del Gobierno en Vitoria, Gloria Sánchez, quien se trasladó esta mañana hasta el lugar del primeratentado.

También lo hizo el presidente de la entidad atacada, Gregorio Rojo, quien explicó que el muro de acero que limitala finca de la Caja con el parque del Buesa evitó que los destrozos fueron mayores.

El alcalde de Vitoria, Patxi Lazcoz, dijo que era un atentado "contra el corazón de los vitorianos y vitorianas".

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, condenó ambos atentados y expresó "su repulsa ydesprecio a quienes practica la violencia", reiterando que el Estado democrático no retrocederá ni un milímetro.