El paro ha pillado desprevenida a toda a una generación de jóvenes. En apenas un año, los efectos de la crisis económica han duplicado la tasa de desempleo entre los trabajadores de 25 a 29 años que abandonaron sus estudios tras acabar la formación obligatoria. Si en junio de 2008 el paro afectaba al 10,9% de este colectivo (por un 8,8% entre los que tenían estudios superiores), un año después eran un 20,4% (13,8%), según datos presentados ayer por el Ministerio de Educación.

Las promociones posteriores parecen haber tomado nota de este retroceso. Uno de cada cuatro alumnos matriculados este curso en la educación no universitaria lo ha hecho en Formación Profesional (FP). El año pasado eran uno de cada 20.

La FP ha crecido en 42.614 alumnos, un 7,8% más que el año pasado. Las matrículas en el total de la educación no universitaria han crecido un 2,4%, para alcanzar los 176.155 alumnos.

El bajo porcentaje de alumnos y titulados en FP es una de las debilidades que tradicionalmente los organismos internacionales achacan a España. Un 31% de jóvenes deja de estudiar en el país tras finalizar la formación obligatoria.

El ministro de Educación, Ángel Gabilondo, valoró ayer como 'esperanzador' el ascenso de matrículas en FP y precisó que los datos demográficos no explican la subida, inédita en los últimos 15 años.

El bajo porcentaje de alumnos de FP es el punto débil del sistema en España

Dentro de los diferentes niveles de FP, asciende un 31% el alumnado de los Programas de Cualificación Profesional Inicial (PCPI). Estos jóvenes son aquellos captados para la FP desde 3º de ESO y que representan el colectivo en mayor riesgo de engordar la cifra de fracaso escolar.

El ministro destacó el aumento general de escolares, que llega a los 7.632.961. El Gobierno interpreta que es un signo positivo para afrontar el futuro con más garantías, puesto que si algo demuestran los datos, es que a mayor formación, menor desempleo.

Gabilondo prevé reunirse con De Cospedal por un pacto educativo

Gabilondo se mostró 'sólo razonablemente satisfecho' con los datos de matriculación para el curso que viene y repitió la necesidad de impulsar un pacto político para estabilizar el rumbo de la educación 'por generaciones en lugar de por elecciones'.

El ministro prevé reunirse en las próximas semanas con la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, para alcanzar puntos de acuerdo.

Gabilondo señaló que ese pacto por la educación junto a otro similar en política energética, que corresponderá negociar al Ministerio de Industria es una de las prioridades del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que así se lo manifestó cuando accedió al cargo.

El PP presenta a votación hoy una moción que vilipendia la LOE

Aunque no desveló las diferencias que le separan del PP, sí avanzó que el acuerdo girará en torno a garantizar la 'estabilidad normativa'. Según Gabilondo, la necesidad de que permanezca la LOE (Ley Orgánica de Educación) como el marco regulador de la educación es un 'clamor popular'.

El PP, no obstante, presentará hoy mismo a votación en el Congreso una moción que vilipendia esa ley, por considerar que no inculca en los alumnos el esfuerzo.

Las estadísticas del Ministerio incorporan datos sobre el reparto de alumnos entre centros públicos, privados y concertados (también privados, pero que reciben financiación pública) por Comunidades Autónomas. Madrid y País Vasco son las únicas autonomías en las que más del 40% de los alumnos estudian en centros privados o concertados.

El 31% de los alumnos deja de estudiar al acabar la ESO

El Gobierno de Esperanza Aguirre (PP) ha aumentado en los últimos cinco años un 91,5% su gasto en la educación concertada, según CCOO. Esta inversión ha dejado al margen a los inmigrantes.

En Madrid, hay 138.398 alumnos hijos de inmigrantes (un 13% del total), de los cuales un 75,8% estudia en centros públicos; el 17,8%, en centros concertados, y el 6,4% restante, en centros privados.

El País Vasco, con 334.193 alumnos, es la única comunidad autónoma que tiene más alumnos en la educación privada (0,9%) y concertada (49,5%) que en la pública (49,6%), pero su reparto de la población inmigrante es más equitativo: un 66,9% en la pública, un 32,4% en la concertada y un 0,7% en la privada.