El ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, dijo hoy que la tasa de paro de España supera a la de Europa "ahora" y también cuando gobernaba el PP (1996-2004) porque el problema del desempleo en España es "estructural".

Así respondió Corbacho a la portavoz del Grupo Parlamentario Popular en el Senado Araceli Peris Jarque sobre la valoración del Gobierno acerca del barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) según el cual más del 76% de los españoles considera el paro el principal problema del país.

La senadora popular reprochó al ministro que, ante la previsión de subida del paro en octubre, haya dicho que es por razones estacionales y recordó que no es "estacional" que haya cuatro millones de parados y que se puedan superar los cinco millones en 2010.

Corbacho le contestó que la crisis económica ha tenido en España consecuencias "muy notables", por lo que consideró lógico que los ciudadanos sitúen esta preocupación en primer lugar, como lo es también del Gobierno.

En cuanto al paro, el ministro dijo que el reto futuro es solucionar el problema del desempleo en España, que es de carácter estructural, al tiempo que recordó que hasta en plena expansión económica dicha tasa estaba por encima del 10 por ciento.

Corbacho insistió en que octubre es un mes que históricamente tiene un comportamiento estacional y la media de desempleados crece cada año en 41.000 personas, por lo que auguró que este año seguirá creciendo.

No obstante, dijo que habrá que comparar este octubre "en crisis" con el mismo mes del año pasado, "también de crisis", para ver si crece con la misma intensidad o de forma más amortiguada.

Acusó al PP de querer que cuanto peor le vaya al Gobierno "es mejor", señaló que "les traiciona el inconsciente" y que por eso auguran que los parados llegarán a cinco millones.

Peris Jarque calificó las medidas del Ejecutivo de "pocas, ineficaces e improvisadas" y añadió que el Gobierno sólo habla de protección porque "es lo único que todavía no ha podido estropear".

No obstante, también reprochó al Gobierno que de los 340.000 potenciales demandantes de la ayuda de 420 euros para desempleados que hayan perdido la prestación o el subsidio, sólo el 15% lo ha solicitado.

Corbacho respondió que "debería alegrarse" de que tan pocas personas se acojan a la ayuda de 420 euros porque significa que la red de protección social es lo suficientemente importante como para que no haya tantas personas que deban recurrir exclusivamente a esta renta.