El Ibex-35 de la bolsa española cerró el jueves con una caída cercana al cuatro por ciento y perdió el nivel de los 10.000 puntos arrastrado por el desplome de los valores del sector energético que se comportó en línea con las compañías de su sector en Europa.

Las bolsas europeas cerraron el jueves con descensos, pese a una escalada inicial, presionadas por la caída de los títulos bancarios y energéticos y por las pérdidas de Wall Street.

El índice paneuropeo FTSEurofirst 300 cerró con un descenso del 2,3 por ciento a 918,85 puntos, tras haber alcanzado su nivel más bajo desde noviembre de 2003. Previamente en la sesión, selectivo subió hasta 966,7 unidades.

Además, las acciones estadounidenses cayeron el jueves por séptima sesión consecutiva, porque los inversores apostaron a que las recientes medidas de autoridades de todo el mundo para destrabar los mercados de crédito no serán suficientes para evitar una recesión mundial.

El promedio industrial Dow Jones cerró extraoficialmente con una baja de un 7,33 por ciento a 8.579,19 unidades. El índice Standard & Poor's 500 perdió un 7,61 por ciento a 910 unidades, mientras que el tecnológico compuesto Nasdaq retrocedió un 5,47 por ciento a 1.645,12 unidades.

"En el tramo final de la jornada se ha vuelto a incrementar la incertidumbre y no nos queda más que constatar que las medidas de las autoridades de bajar tipos y de aportar o facilitar liquidez no han tenido el efecto deseado", dijo José Luis Martínez, estratega de Citigroup.

El Ibex-35 bajó un 3,83 por ciento, a 9.902,9 puntos hasta situarse en mínimos desde mediados de julio de 2005.

En tanto, el índice general de la Bolsa de Madrid cayó un 3,54 por ciento a 1.066,10 unidades.

Las compañías eléctricas fueron las principales responsables de las caídas, en un movimiento de corrección que afectó a todo el sector europeo provocado en parte, según analistas, por movimientos de carteras de los 'hedge funds' y por la caída de los precios del petróleo.

El crudo apenas es utilizado para producir energía, pero la evolución de su cotización es contemplada por muchos agentes del mercado como una indicación para el precio de otras materias primas como el carbón y el gas, que son elementos clave para determinar los precios energéticos.

"Parte de la culpa puede ser de los hedge funds, que estarían deshaciendo posiciones para ajustar sus carteras", dijo un gestor de carteras de Renta 4.

GENERAR CONFIANZA

Iberdrola fue el valor más castigado del selectivo con una bajada del 8,56 por ciento. Repsol-YPF perdió un 7,63 por ciento. Red Eléctrica cayó un 7,58 por ciento, Enagás, un 7,56 por ciento, y Endesa, un 6,43 por ciento.

Los operadores destacaron además que la inercia de los mercados era bajista y que de momento la clave para la recuperación pasaba por volver a generar confianza en el sistema para que medidas, como la baja de tipos de interés concertada y las inyecciones de liquidez, puedan tener un efecto favorable en las bolsas.

Santander, BBVA y Telefónica, los tres valores con mayor peso en el índice selectivo, también contribuyeron el jueves con descensos superiores al 3 por ciento al descenso de la bolsa española.

A contracorriente destacó en esta jornada el grupo tecnológico y de defensa Indra con un avance del 2,74 por ciento después de que entre el 3 y el 8 de octubre hubiera retrocedido casi un 10 por ciento.

Le siguieron en las ganancias las acciones de Bolsas y Mercados Españoles, con repunte del 1,95 por ciento, y Sacyr Vallehermoso y Bankinter, con ganancias del 0,75 por ciento y del 0,71 por ciento, respectivamente.

/Por Jesús Aguado y Clara Vilar/