El actual consejo de administración del Levante seguirá al frente del club valenciano aunque bajo la supervisión de los tres administradores, nombrados hoy por el juez, según ha informado Víctor Santamaría, portavoz y miembro del órgano rector de la entidad.

El titular del Juzgado de lo Mercantil número 2 de Valencia declaró esta mañana el inicio de un concurso necesario de acreedores de la mercantil Levante Unión Deportiva SAD, según informó el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV).

La solicitud se presentó el pasado 3 de julio por parte de un grupo de 80 acreedores -entre ellos varios futbolistas de la plantilla-, y al día siguiente el club se acogió a la Ley Concursal con la solicitud de un concurso voluntario debido a su situación de insolvencia.

"El consejo tiene libertad para gestionar todos los aspectos relacionados con el tráfico jurídico, deportivo y mercantil del Levante, pero la palabra clave será una intervención o una aprobación de los administradores", aclaró Santamaria a los medios de comunicación tras la reunión que mantuvo hoy el consejo.

En este mismo sentido, Santamaría aclaró sobre los administradores que: "nos van a poner limites en cuanto al dinero que nos podemos gastar en la adquisición de jugadores o en una operación de similar".

Santamaría ha señalado que la ley concursal y la venta del club "son dos cosas completamente distintas, ya que desde hoy el Levante UD esta en procedimiento concursal, lo que no supone que dentro de un día, dos, una semana o tres meses venga alguien y compre el club".

A Santamaría no le consta que se haya producido nuevos contactos entre Tomás Carmona, representante del grupo inversor que había mostrado interés por comprar el club, y los accionistas que pretenden vender sus títulos.

Sin embargo, en este sentido agregó: "la realidad es que hay un grupo comprador que está interesado en comprar, pero que no ha citado al club para hacer efectiva la compra".

Además, el portavoz del Levante explicó que el proceso concursal viene motivado por "una falta de liquidez que deriva en unos mecanismos legales para que la empresa, en este caso Levante, salga a flote y se libere de sus deudas, pero si alguien invierte dinero y soluciona el problema, no tiene caso la ley consursal, y por lo tanto se levantaría".

Según Santamaría, los administradores conocen "el 100 por cien la coyuntura actual del Levante porque la obligación del consejo de administración es informar de todo, pero hay cosas de las que aún no han podido hablar", lo que ha motivado que el próximo jueves haya una reunión entre ambas partes para concretar todos los detalles.