El pleno del Congreso celebra esta tarde el debate de la convalidación o derogación del decreto-ley de la reforma laboral, y una vez aprobado, como es previsible, decidirá si la tramita como proyecto de ley para que los grupos políticos puedan introducir enmiendas.

El Gobierno da por hecho que ambas votaciones saldrán adelante en el pleno de la Cámara Baja, y espera que los grupos accedan también a que la tramitación se haga por la vía de urgencia, lo que permitiría que la reforma quedase aprobada con los cambios parlamentarios antes de que acabase el verano.

Sólo el PNV ha dejado claro ya su voto -la abstención- y aún habrá que esperar a que el principal partido de la oposición, el PP, así como Convergencia i Unió decidan su posición en este debate, aunque la de los nacionalistas vascos allana bastante el camino para que el decreto salga adelante.

A pesar de todo, el PP instó ayer al Gobierno a que le llame antes del "último minuto" para explorar vías de un hipotético acuerdo y los populares puedan decidir el voto, ya siguen sin tener "una postura máxima cerrada".

CiU, por su parte, esperará a la reunión que su grupo parlamentario mantiene antes del debate para decidir su posición.

El PSOE lo tiene más difícil con las formaciones de izquierda, que ya han dejado claro que, con toda probabilidad, votarán en contra del decreto.

Así lo admitió ayer ERC, que justificó este previsible voto en contra de la reforma en el hecho de que "cuela el despido libre por la puerta trasera", como señaló su presidente, Joan Puigcercós. Tampoco se esperan sorpresas con IU e ICV, que han dejado muy claro su rechazo al decreto.

El ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, expondrá al inicio de este debate los términos de este decreto, que generaliza el uso del contrato de fomento del empleo, que tiene una indemnización por despido improcedente de 33 días, más barata que el contrato fijo ordinario, de 45.

La norma también admite la posibilidad de que cualquier empresa con una "situación económica negativa" pueda recurrir al despido objetivo de sus trabajadores.

El decreto incluye bonificaciones a la contratación fija y penaliza la temporal limitando los encadenamientos de los contratos y los empleos por obra y servicio.