México y España coincidieron hoy en que la mejor apuesta para alcanzar el crecimiento en "tiempos turbulentos" es la integración, la libertad económica y la certidumbre jurídica, y no el estatismo ni el proteccionismo, dijo el presidente mexicano, Felipe Calderón.

En una breve comparecencia ante los medios en el Palacio Nacional tras reunirse con el jefe del Gobierno español, Mariano Rajoy, el mandatario mexicano destacó que ambos líderes están de acuerdo en que se debe apostar por la productividad y la competitividad.

"Las coordenadas del crecimiento y el progreso pasan por la integración, la libertad económica y la certidumbre jurídica, y no por el estatismo ni proteccionismo", dijo Calderón, quien respaldó a España tras la decisión argentina de expropiar la mayoría de las acciones de propiedad de Repsol en la petrolera YPF.

Además, reconoció "el valor" y la responsabilidad" con que el Gobierno de España se ha conducido en momentos de adversidad, tomando las decisiones necesarias para aliviar los problemas que el país ha tenido que "enfrentar" en medio de la actual turbulencia económica.

El presidente mexicano dijo tener la "certeza de que en el futuro España puede aspirar a condiciones significativamente mejores gracias a las resueltas decisiones que está tomando el Gobierno español en este momento".

Sobre las relaciones bilaterales, Calderón resaltó que "pasan por su mejor momento", si bien reconoció que pueden mejorar aún más, tanto en materia económica y comercial, como en el ámbito cultural.

En ese sentido, el mandatario exhortó a los empresarios españoles a constatar las "enormes ventajas competitivas que ofrece la economía mexicana" en sectores tan importantes como el turismo, el automotor y el de la construcción, "en condiciones de plena certeza jurídica".

Además, Calderón manifestó a Rajoy el "gran interés" de los empresarios mexicanos por invertir en España y confió en que la visión y la confianza de los hombres de negocios de ambas naciones permitan "acrecentar" el comercio y la inversión a ambos lados del Atlántico.

El comercio bilateral "es de casi ya 9.000 millones de dólares al año, casi el triple de lo que teníamos hace 10 años", recordó, para añadir que España es el segundo socio comercial de México en Europa.

"Es muy claro que aún podemos lograr un mayor intercambio", manifestó el gobernante mexicano, quien también aludió al potencial para aumentar la colaboración en materia cultural.

En el encuentro, Calderón expresó al jefe del Ejecutivo español su respaldo en la realización de Cumbre Iberoamericana que se celebrará en noviembre de este año en la ciudad española de Cádiz.

A su vez, el gobernante mexicano recibió el apoyo de España de cara a la Cumbre del G20 que se llevará a cabo en junio próximo en el balneario mexicano de Los Cabos, así como a las prioridades establecidas por la presidencia mexicana de ese grupo.

Tras la reunión con Calderón, Rajoy visitará la exposición de los "Tesoros reales de España" y el museo que hay en el Centro Cultural de España (CCE).

Después se reunirá con el jefe de Gobierno del Distrito Federal, el izquierdista Marcelo Ebrard, quien le nombrará "Huésped Distinguido" de la Ciudad de México en un acto en donde recibirá las llaves de la urbe.

También tiene previsto un encuentro con los candidatos a la Presidencia en las elecciones del 1 de julio, Enrique Peña Nieto, del Partido Revolucionario Institucional (PRI); Josefina Vázquez Mota, del conservador Acción Nacional (PAN); y Andrés Manuel López Obrador, del Partido de la Revolución Democrática (PRD).

Concluidas sus actividades en México, Rajoy emprenderá viaje hacia Colombia, la segunda etapa de su primera gira latinoamericana.