El esloveno Janez Brajkovic se llevó el domingo la general de la Dauphiné-Liberé por delante del español Alberto Contador, demostrando que tiene un hueco en la plantilla que el equipo de Lance Armstrong se llevará al Tour de Francia que comienza el próximo mes.

El ex campeón sub 23 contrarreloj, que ganó el miércoles la contrarreloj individual de 49 kilómetros, se impuso al bicampeón del Tour de Francia para conseguir la victoria más importante en una vuelta por etapas de su carrera.

El corredor de 26 años no tiene asegurada todavía la inclusión en el equipo que el RadioShack llevará al Tour, que comienza el 3 de julio, pero indudablemente ha aumentado sus opciones.

"Es algo bueno para mí. Me permite poder estar en el Tour de este año. Si no, ¿puede ser el que viene?", dijo tras cruzar la línea de meta de la última etapa, de 148 kilómetros.

Brajkovic, que ha pasado la mayor parte de su carrera profesional bajo las órdenes del director de Armstrong, Johan Bruyneel, acabó un minuto y 41 segundos por delante de Contador en la clasificación general.

El estadounidense Tejay Van Garderen finalizó tercero a un minuto del español.

Brajkovic, impresionante contra el crono, también ha demostrado unas grandes habilidades como escalador en la penúltima etapa con final en el Alpe d'Huez y ha dicho que todavía no ha alcanzado todo su potencial.

"He tenido suerte hoy porque Alberto no me ha atacado. Supongo que no se quiso arriesgar a una caída en los descensos por lo que fue bueno para nosotros".

"No olvidemos que Contador no ha llegado aquí en su mejor forma sino para preparar el Tour", apuntó.

La etapa final acabó con cinco vueltas a un accidentado circuito con un trepidante descenso y entre los favoritos no hubo diferencias.

Por el contrario, el noruego, Edvald Boasson-Hagen, hizo un atrevido ataque en la última vuelta para ganar la etapa en solitario, por delante del español Arkaitz Durán y el ruso Egor Silin.

Con 23 años, Boasson-Hagen tiene un impresionante récord de victorias con tres campeonatos nacionales de Noruega, la clásica Ghent-Wevelgem y una etapa del Giro de Italia.

"Como líder del Team Sky, tuve que probar por cuenta propia. Estoy realmente contento de conseguirlo. Fue arriesgado pero estaba confiado en el descenso", manifestó.