El buen dato del empleo en EEUU, que  ha animado a los mercados europeos, que han terminado la subida con alzas. La caída de la tasa de paro estadounidense a su nivel más bajo en casi cautro años y medio han alentado las expectativas de una aceleración en el crecimiento global mientras los bancos centrales mantienen políticas monetarios de apoyo a la economía. En España, la bolsa se ha visto animada, además, por la mejoría de la prima de riesgo española.

El Ibex 35 ha subido un 2,85% al cierre del mercado y se ha anotado su segundo mayor avance del año. El selectivo conquista los 8.600 puntos y suma un 5,4% en las últimas cinco sesiones. Así, el Ibex arrancará la próxima semana desde los 8.628 puntos, su nivel más alto desde el 29 de enero. En Europa, el índice Euro STOXX 50, que agrupa a las principales empresas del contiente, ha avanzado un 1,3%, marcando unas ganancias semanales del 4,2%, el mejor resultado en cuatro meses.

En febrero, EEUU ogró crear 236.000 empleos, según las estadísticas del Departamento del Trabajo, superando con creces las expectativas de los analistas de 160.000 nuevos empleos. Con ello, la tasa de desempleo cayó a un 7,7%, la cifra más baja desde diciembre de 2008 y dos décimas menos que en enero, lo que sugiere que la economía estadounidense cuenta con impulso suficiente para resistir el golpe de subidas de impuestos y profundos recortes del gasto público: el 1 de enero llegó a su fin un recorte de un 2% de los impuestos a las nóminas y la carga tributaria aumentó para los estadounidenses más ricos; y el 1 de marzo entraron en vigor recortes presupuestarios federales de 85.000 millones de dólares (casi 70.000 millones de euros), que podrían recortar hasta un 0,6 puntos porcentuales del crecimiento este año.

Para la Casa Blanca, el dato del empleo de febrero 'proporciona evidencias de que la recuperación que se inició a mediados de 2009 está cobrando fuerza', según el presidente del consejo de asesores económicos presidencial, Alan Krueger.

En España, el interés del bono a 10 años español ha descendido este viernes hasta niveles de comienzos de 2012 ante una mejora de la confianza inversora en un clima financiero de abundante liquidez que busca papel de alta rentabilidad. Gracias a ello, el diferencial con la deuda española se ha recortado hasta los 323 puntos, a tan solo 13 puntos del diferencial italiano (cuando el margen a comienzos de año rondaba los 100 puntos), en su nivel más bajo del último año.

Entre los inversores se afianzaba la idea de que los principales bancos centrales el mundo - La Reserva Federal, el Banco de Japón y el Banco Central Europeo - están dispuestos a mantener flexibilidad monetaria hasta constatar una reactivación económica perdurable. Las cotizaciones reflejaban que el bono español capitalizaba particularmente este escenario de mayor confianza inversora, reduciendo también el diferencial frente al bono italiano, éste último algo más presionado por el disperso resultado de las recientes elecciones parlamentarias en aquel país.