Un total de 60 cuadros de la colección de bodegones españoles del Museo del Prado podrán verse a partir de hoy en Santa Cruz de Tenerife, en una muestra que el director del centro, Miguel Zugaza, considera "un auténtico festín de los sentidos, los más ricos enseres" de la pinacoteca española.

La muestra pertenece al programa de exposiciones itinerantes del Museo del Prado, con obras que se extienden desde comienzos del siglo XVII hasta mediados del XIX, y pintores como Van der Hamen, Zurbarán, Meléndez o Goya, de quien se muestran dos cuadros, uno de ellos, "Las aves muertas", considerado rupturista respecto a este género.

La exposición ha sido inaugurada por el ministro de Cultura, César Antonio Molina, y podrá verse hasta el 31 de mayo en la sede principal de CajaCanarias en Santa Cruz de Tenerife, una entidad que acogerá en 2010 una nueva muestra con fondos del Museo del Prado para celebrar su primer centenario.

El director del Museo del Prado, Miguel Zugaza, ha subrayado que esta exposición revela al espectador "una cena extraordinaria" para los sentidos, con sus muestras de frutas, carnes, bebidas o flores, y también reúne "lo más moderno" que ha adquirido la pinacoteca en este género, como la colección "Naseiro".

Miguel Zugaza destacó que este género artístico ha sido reivindicado en las dos últimas décadas del siglo XX, y ha explicado que "esta devoción por lo real" es una tradición en la pintura española, en la que se pintaron bodegones casi desde "el hito fundacional" que supuso la incursión de Caravaggio en este campo.

"El bodegón español está en el origen del género y llega hasta nuestros días, pues casi todos los pintores lo han tratado, desde Zurbarán y Velázquez hasta Picasso, Miró y Dalí", detalló.

El comisario de la exposición, Juan J. Luna, jefe del Departamento de Pintura del siglo XVIII en el Museo del Prado, ha afirmado que esta pinacoteca "es imbatible" en cuanto a la colección de bodegones, aunque todavía faltan "algunos huecos", lo que hace que se mantenga "activo" y no pierda "el dinamismo".

La muestra reúne piezas de "las seis fuentes" de las que se provee el Museo del Prado, que son las colecciones de la Familia Real, de la Real Fábrica de Tapices, las compras del Estado, donaciones de particulares, el legado y las aportaciones de empresas.

Luna ha destacado especialmente el cuadro "Las aves muertas", que Goya parece haber pintado para sí mismo y en el que no hay ninguna armonía, por lo que parece adelantarse al expresionismo del siglo XX y no tiene "nada que ver" con el resto de bodegones que lo rodean en la muestra.