El ministro de Fomento, José Blanco, ha descartado hoy que el nuevo modelo de financiación autonómica y el desembolso de recursos que pueda suponer vaya a afectar a las inversiones en infraestructuras, ni a las comunidades autónomas que no lo suscriban.

Blanco se ha reunido con el presidente de La Rioja, Pedro Sanz, para tratar de las infraestructuras en esta región y, a preguntas de los periodistas, ha negado esta posibilidad.

El ministro ha precisado que cuando el Departamento "hace un compromiso" se hace "siendo consciente de la situación económica y de los Presupuestos", por lo que no comprometen actuaciones que no cuenten con un presupuesto para que puedan ser licitadas y ejecutadas en los tiempos determinados.

"En ningún caso la financiación autonómica -ha destacado- va a condicionar las actuaciones del Ministerio de Fomento, ni tampoco la posición que adopten los Gobiernos autonómicos con los acuerdos que se alcancen" con su Departamento.

Se ha comprometido a mantener para el año próximo una media de inversión en obra pública similar a la de éste.

Pedro Sanz ha puesto de manifiesto su contrariedad por cómo se llevan las negociaciones para llegar a un acuerdo en el nuevo sistema de financiación autonómica.

Ha insistido en que apenas han contado con él y que a día de hoy no conoce las cifras, por lo que "La Rioja, ni otras comunidades autónomas, no han negociado nada, por lo que, difícilmente, podemos tener una postura u otra".

"Simplemente -ha continuado-, estamos inquietos, molestos y nos sentimos discriminados porque hay más diálogo y negociación con Cataluña que con el resto de autonomías".

Sanz ha precisado que no aceptará un sistema que "tuviese por detrás" la participación de las comunidades en los Presupuestos Generales del Estado y en los planes e inversiones de los respectivos Ministerios.