El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, instó hoy a reanudar las negociaciones entre el grupo 5+1 e Irán para resolver de manera pacífica la disputa sobre el programa nuclear de la República Islámica.

Ban señaló que ha conversado sobre esa posibilidad con varios líderes europeos para animarles a que se siga tratando de acordar con Teherán la reanudación del diálogo.

"Incluso con las nuevas sanciones adoptadas por el Consejo de Seguridad, la puerta está abierta a una solución negociada", dijo en una conferencia de prensa el máximo responsable de Naciones Unidas, quien reafirmó su voluntad de seguir promoviendo el diálogo en las conversaciones que sostenga con "líderes mundiales y partes interesadas".

En ese sentido, el presidente de Irán, Mahmud Ahmadineyad, afirmó hoy que su país dialogará con el grupo 5+1 (EEUU, Rusia, China, Francia, Reino Unido y Alemania) a finales de agosto, pero bajo nuevas condiciones fijadas por Teherán.

Entre los nuevos requisitos estarían aclarar la postura de las potencias respecto al supuesto arsenal nuclear de Israel, su nivel de compromiso con el Tratado de No Proliferación (TNP) y si buscan un resultado de "amistad o enemistad" en el diálogo.

Varios miembros del Consejo de Seguridad de la ONU expresaron hoy en una reunión del órgano sobre las sanciones a Teherán su disposición a conversar, pero también con condiciones.

El representante del Reino Unido, David Quarrey, reiteró la disposición de reanudar el diálogo y señaló que la jefa de la diplomacia europea, Catherine Ashton, realiza gestiones para volver a abrir las negociaciones.

"Al extender de nuevo la mano, demostramos nuestra determinación a resolver estos asuntos mediante el diálogo y la diplomacia, lo que contrasta con las reiteradas negativas de Irán a discutir su programa nuclear", señaló.

El Consejo también analizó en la reunión de hoy el grado de cumplimiento de las cuatro rondas de castigos impuestas a Irán por desafiar las resoluciones de Naciones Unidas y seguir adelante con el enriquecimiento de uranio, entre otras acciones.

El embajador de Japón ante la ONU, Yukio Takasu, presentó un breve informe sobre las actividades del comité de sanciones a Irán que preside.

Entre otras cosas, hizo referencia, sin mencionar países, a la controversia causada por la retención en Alemania de materiales destinados a la construcción por parte de ingenieros rusos de la central nuclear iraní de Bushehr.

Rusia considera que las autoridades alemanas se extralimitaron en sus acciones en este caso, ya que los materiales en cuestión estarían permitidos bajo las resoluciones de la ONU, aunque podrían infringir las impuestas por la Unión Europea (UE), dijeron a Efe fuentes diplomáticas.