Los resultados trimestrales que publicará hoy Apple al cierre de la Bolsa reflejarán el excelente momento que vive el gigante tecnológico, pero la baja temporal de su cofundador, Steve Jobs, puede ensombrecer el anuncio ante el interrogante que abre para los mercados sobre el futuro de la firma.

Los productos de Apple son regalos populares, y así, cuando publique hoy el resultado del primer trimestre fiscal, que concluyó en diciembre en EE.UU., se podrá alegrar de un incremento porcentual de dos dígitos en sus ingresos.

Los analistas prevén un aumento del 55 por ciento en sus ingresos, hasta alcanzar los 24.300 millones de dólares.

Auguran asimismo que los beneficios se incrementen hasta 5,35 dólares por acción, lo que supondría un alza del 46 por ciento con respecto al mismo periodo del año anterior.

La gran pregunta ahora es si los buenos resultados trimestrales que se prevén para Apple aplaquen lo que se espera será una fuerte reacción de los mercados a la nueva baja temporal que el consejero delegado y cofundador de la multinacional, Steve Jobs, se ha tomado por razones médicas.

La Bolsa permaneció el lunes cerrada en EE.UU. con motivo de la celebración del nacimiento de Martin Luther King, por lo que se espera que hoy a la apertura Wall Street reaccione inmediatamente al anuncio.

Las acciones de Apple cerraron la semana pasada en un récord de 348,48 dólares.

Jobs dijo que permanecerá "involucrado en las decisiones estratégicas" de la compañía, al seguir como consejero delegado.

Pero, la incertidumbre se ha generado más por lo que no dice que por lo que dice en su comunicado.

El ejecutivo dijo esperar "estar de vuelta tan pronto como pueda", no precisó una fecha, aunque fuera aproximada, como había hecho en otras ocasiones.

Jobs deja a Tim Cook, jefe de operaciones de Apple, al cargo de la empresa durante su ausencia.

La primera reacción de los mercados no se ha hecho esperar.

Poco después de conocerse el anuncio de Jobs, las acciones de Apple caían un 7 por ciento en la Bolsa de Fráncfort.

El analista de Gleacher & Co, Brian Marshall, citado por la revista Forbes, prevé una caída de hasta un 15 por ciento en el valor de las acciones de Apple en EE.UU..

Este experto calcula incluso que hay solamente una posibilidad del 50 por ciento de que Jobs vuelva como consejero delegado a tiempo completo. "Yo creo que ésta es la última vez en que le veamos a Steve como consejero delegado. Creo que Tim Cook será nombrado en su lugar en algún momento del año", afirmó.

Gene Munster, un analista de Piper Jaffray, señaló que los inversores temen que la nueva baja temporal del máximo ejecutivo de Apple pueda significar algo más serio. Para este experto, no se trata tanto de hablar de fechas sino de la pregunta de si Jobs realmente permanece involucrado en las decisiones estratégicas.

Este analista siempre ha creído que las acciones de Apple caerán un 10 por ciento en una era sin Jobs al frente de la empresa.

Pero de momento para hoy augura un descenso del 5 por ciento.

En definitivo, los inversores negociarían las acciones como si Jobs ya hubiera renunciado, según Forbes.

Jobs, quien superó un cáncer de páncreas en 2004, ya solicitó una baja médica en enero de 2009 para tratar algunos "desequilibrios hormonales", aunque luego se conoció que se había sometido a un trasplante de hígado en abril de ese año en un hospital de Tennessee.