El portavoz del PSOE en el Congreso, José Antonio Alonso, cree que el líder del PP, Mariano Rajoy, batió ayer "el récord parlamentario mundial en ausencia de propuestas", ya que, tras dos horas debatiendo con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, no puso ninguna iniciativa sobre la mesa.

Alonso ha cerrado hoy el turno de intervenciones de los portavoces parlamentarios en el debate sobre el estado de la nación que se celebra en la Cámara Baja, donde ha contrastado las medidas "inteligentes", "potentes y muy bien estructuradas" que Zapatero planteó para superar la crisis con la ausencia de propuestas del PP.

Después de anotar que Rajoy se condujo en un tono de "crispación y descalificación", ha recalcado que el líder del PP exigió una reforma fiscal "de verdad", aunque "no dio ni una pincelada" de en qué debe consistir alegando "falta de tiempo".

Por eso, Alonso ha deducido que "o no se atreve a ponerlas encima de la mesa, o no las tiene". "Asústense", ha alertado el dirigente socialista.

Igualmente, ha rechazado las sugerencias del PP para que se reduzca el papel del poder público en la actividad económica, porque, según ha deducido, con esa medida sólo los que tengan recursos privados seguirán "disfrutando de la vida", mientras que el resto "quedan abandonados a su suerte".

También ha hecho hincapié en que "Bush, Aznar y compañía, y en la compañía estaba Rajoy", fueron los que "dieron cobertura política a la especulación financiera y cimentaron los pilares del desastre" económico que actualmente vive el mundo.

Y ha querido dejar claro que, en una época como ésta en la que los recursos son escasos, el Gobierno socialista no quiere "gastar por gastar", sino que ahora son "más selectivos y más eficientes que nunca".

Frente al panorama "gris, casi negro" que dibujó ayer Rajoy, ha contrapuesto la disposición del resto de los grupos a colaborar, aunque ha reconocido que no hay soluciones rápidas ni inmediatas a la salida de la crisis y de las adversidades, de la que la sociedad sabrá sobreponerse porque España no es "un país de resignados".

El objetivo del PP, a juicio de Alonso, es desgastar al Gobierno para tratar de "ganar el poder político", y, por ello, fomenta la incertidumbre y convoca a un futuro desolador.

Bajo su punto de vista, en ocho años el PP "no hizo nada y ahora no ofrecen absolutamente nada", salvo "volver al pasado, como siempre".

"Pero la política no es pasado, sino presente y futuro", ha continuado Alonso, quien ha responsabilizado al PP de la burbuja inmobiliaria y de haber cabalgado "a lomos de la especulación", mientras que el PSOE camina en la "senda de la inteligencia" y de un modelo productivo que "deje de darse de morros contra el ladrillazo" y apueste por la innovación y la producción.

"No queremos agoreros, sino que se arrime el hombro", ha apostillado Alonso, quien, además, ha criticado a Rajoy porque ayer espetó a los diputados socialistas: "Pero si ustedes no saben leer".

Tras exhibir la "fuerza" de los más de once millones de votos que el PSOE obtuvo en las elecciones generales de 2008, ha subrayado que no podía "tolerar" el "insulto personal y gratuito" a los 169 diputados socialistas.

Según Alonso, ayer quedó claro la "decadencia" de Rajoy, a quien ha preguntado "¿cómo puede aspirar a gobernar un político (...) que pierde de tal modo los papeles a la primera de cambio?"

Respecto a la política exterior, ha enfatizado que España es ahora "un país fuerte y respetado" porque el Gobierno de Zapatero le ha sacado "del embrollo" en el que el PP "y sus amigos" le metieron, y le han asentado "en el centro del lugar" donde se toman las decisiones, en alusión al G-20.

Y ello pese a que, a su entender, el PP, en sus ocho años en el poder, colocó a España "en medio de la nada, naufragando en las Azores" y "contribuyendo a guerras ilegales".