Los precios subieron en febrero un 0,9% respecto al mismo mes del año anterior, según el IPC adelantado que publicó ayer el INE. Aunque de signo positivo, el dato es inferior al de enero, cuando el IPC se situó en el 1,1%, por lo que rompe la tendencia al alza que marcaba desde septiembre, con cuatro meses de subidas.

El INE justifica esta disminución en dos décimas de la inflación por la estabilización del precio de los carburantes y por el abaratamiento de los alimentos. Los expertos anticipan que habrá todavía más reducciones, sobre todo por el reajuste en la alimentación elaborada.

En el Instituto Flores de Lemus, de la Universidad Carlos III de Madrid, creen que los alimentos están eliminando la subida de precios 'anómala' que registraron en 2008, cuando estos productos crecían a tasas superiores al 7%.

El coordinador del servicio de estudios, Emiliano Carluccio, explica que durante este primer trimestre de 2010, los alimentos elaborados terminarán de corregir aquel año de subidas, y será entonces cuando se pueda apreciar realmente la tendencia que van a tomar los precios. 'Los alimentos se va a quedar como si aquel año atípico no hubiera sucedido', concluye Carluccio.

Los alimentos frescos fueron los primeros en depurar el exceso de precios y desde abril de 2009 registran tasas negativas. Ahora es el turno de los productos elaborados, que con los datos disponibles hasta enero aún no han registrado ninguna caída de precios. Febrero puede ser el primer mes en que estos productos se abaraten. El dato se conocerá a mediados de este mes, cuando se confirmará el IPC definitivo.

Por el momento, los expertos mantienen las previsiones para el conjunto del año en el entorno del 1,3%.