La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, se reunirá mañana con el secretario general del Partido Socialista de Madrid (PSM), Tomás Gómez, horas después de haber mantenido un encuentro con Comisiones Obreras para tratar de llegar a un consenso de las partes en Caja Madrid.

El mismo día en que la Abogacía del Estado, a petición del Gobierno, ha presentado ante el Tribunal Constitucional (TC) el recurso contra la nueva ley de Cajas de la Comunidad de Madrid, Gómez informaba de que mañana por la tarde ofrecerá a Aguirre un "gran pacto de consenso" en Caja Madrid que incluya al alcalde de la capital, Alberto Ruiz-Gallardón.

A este encuentro le precederá otro por la mañana con Comisiones Obreras, sindicato mayoritario de la caja y defensor de las tesis del alcalde capitalino, en el que la presidenta de la Comunidad y el consejero de Economía y Hacienda, Antonio Beteta, compartirán sus ideas acerca de la situación en la entidad, para tratar de buscar una salida consensuada al conflicto en el corto plazo, según indicaron fuentes conocedoras del encuentro.

El pasado jueves, el sindicato ya se reunió con la Comunidad en un encuentro en el que también participó UGT, menos vinculado a las ideas que defienden Ruiz-Gallardón y el presidente de la entidad, Miguel Blesa.

La relevancia de la entrevista de mañana radica en que se produce después de la presentación del recurso del Gobierno ante el Tribunal Constitucional, que si se admite a trámite podría suspender de forma cautelar los artículos impugnados, referentes a la representación en los órganos de gobierno de los sectores de corporaciones municipales e impositores en la entidad.

Por su parte, en la reunión con Aguirre, el líder de los socialistas madrileños defenderá los principios de "legalidad y estabilidad" para la entidad, de forma que, si los nuevos estatutos de Caja Madrid tienen que adaptarse a la ley de cajas regional, se haga cuanto antes.

En cualquier caso, Gómez insistió en que no le gusta la ley de Aguirre porque permite "la injerencia política" en los órganos de gobierno de Caja Madrid, y adelantó que si gana las elecciones autonómicas de 2011 la modificará para que tanto el presidente de la entidad como sus órganos de control tengan un perfil técnico.