Esperanza Aguirre dio ayer uno de sus grandes titulares sorprendiendo incluso, a sus compañeros de mesa en la tertulia de El Cascabel de 13TV. Después de agradecer las últimas encuestas que le sitúan como la líder preferida del PP para encabezar la candidatura conservadora al Ayuntamiento de Madrid (aunque no aclaró si lo será finalmente), la presidenta de la formación en la comunidad autónoma respondió a las preguntas de la mesa sobre su relación con el todopoderoso asesor de Mariano Rajoy, Pedro Arriola. 'Discrepo con él en casi todo', sostuvo la 'lideresa' que, además, advirtió de que cuando las encuestas de los medios sobre ella lleguen a Arriola, éste las 'cocinará para que yo salga mal', auguró entre risas.

Aguirre dejaba así constancia de su mala relación con el 'asesor del presidente', pues, según la exjefa del Ejecutivo madrileño, Pedro Arriola asegura siempre 'con claridad' ser únicamente 'asesor del presidente, no del partido'. Sin embargo, la tertulia del programa de Antonio Jiménez dejó bien claro que el gurú de Rajoy y, antes, de José María Aznar no es una persona apreciada en el PP. El director de La Razón y amigo personal de Rajoy, Francisco Marhuenda, aseguró que 'Arriola sólo se lleva bien con su mujer' (la diputada del PP Celia Villalobos) y, además, 'es una catástrofe para el PP ahora'.

Por su parte, Jaime González, director de Opinión de ABC, le preguntó a Aguirre que, si Arriola sólo era 'asesor del presidente', por qué se iba a negociar a Catalunya con CiU. González se refería así a la información de El Periódico de Catalunya, según la cual, el Gobierno, representando por Arriola, y el PSOE, representado por José Enrique Serrano, exdirector de Gabinete de José Luis Rodríguez Zapatero, mantuvieron encuentros con CiU para tratar de impedir el 9-N y frenar la deriva soberanista de la Generalitat. Aguirre sonrió pero no dio razón alguna.