La represión de las fuerzas de seguridad de Guinea sobre los opositores a la junta militar ha causado 157 muertos, según denunció el martes un grupo de derechos humanos, citando fuentes médicas en la capital.

Thierno Maadjou Sow, presidente de la Organización de Derechos Humanos de Guinea, dijo que esa cifra está basada en datos provistos por hospitales en Conakry y no incluye los cadáveres aún no entregados. Además calculó que más de 1.250 personas resultaron heridas en la violencia del lunes.

Las fuerzas de seguridad de Guinea abrieron fuego contra decenas de miles de manifestantes que se movilizaron contra la posibilidad de que el gobernante militar, el capitán Musa Dadis Camara, vuelva a presentarse a las elecciones del año próximo.

Como consecuencia de la represión, Francia decidió el martes suspender la cooperación militar con su antigua colonia y dijo que presionará a que sus socios europeos para que aprueben sanciones contra los responsables de la actuación violenta contra la oposición.

"A petición nuestra, la Unión Europea se reunirá mañana (miércoles) en Bruselas para estudiar medidas adicionales, sobre todo contra particulares, que podrían adoptarse rápidamente", dijo en un comunicado el ministro francés de Asuntos Exteriores, Bernard Kouchner.

Kouchner calificó la represión de "salvaje y sangrienta" y dijo que Francia está estudiando cómo aportar asistencia médica a los heridos.

Estos choques son los peores en el mayor exportador de bauxita del mundo desde que Camara llegó al poder en un golpe de Estado en 2008, y siguen a meses de enfrentamientos con sus rivales.

"Los soldados dispararon a la gente, y aquellos que intentaron salir (del estadio) fueron capturados y rematados con bayonetas", dijo a Reuters el activista guineano en favor de los derechos humanos Suleymane Bah.

Bah añadió que vio decenas de cadáveres en el estadio donde se reunieron los opositores y confirmó las noticias de abusos de los soldados.

"Vi a soldados desnudar a mujeres, abrirles las piernas y darles pisotones en sus partes", explicó por teléfono.

La Unión Africana advirtió el martes a la Junta Militar de posibles sanciones y ha pedido a Camara que confirme que cumplirá un compromiso que adoptó de no presentarse a las elecciones presidenciales previstas para enero del año que viene y permitir así una transición a un poder civil.

El militar se hizo con el poder después de la muerte del presidente Lansana Conte en diciembre de 2008. En un primer momento tuvo el apoyo de una población deseosa de cambios después de décadas de mandato de Conte, que dejaron al país rico en minerales hundido en el caos.

Sin embargo, su comportamiento cada vez más errático, con redadas contra antiguos partidarios en el Ejército, ataques a compañías mineras de las que depende el país y el hecho de que pueda presentarse a las elecciones de 2010 han alimentado la inestabilidad.