La reconstrucción de Sant Llorenç y el resto del Levante de Mallorca azotado por la torrentada del nueve de octubre avanza y se ultiman las ayudas estatales y autonómicas para los afectados, pero Arthur, el niño de 5 años arrastrado por la riada, sigue sin aparecer.

Alrededor de 300 especialistas del Ejército, la Guardia Civil y los bomberos han rastreado hoy diez puntos del cauce del torrente desbordado, han buceado en la zona de la desembocadura en busca del cuerpo o de cualquier rastro y han navegado en embarcaciones frente a la desembocadura y sobrevolado la zona con tres helicópteros.

"No hemos encontrado ningún rastro de Arthur", ha lamentado esta tarde el director general de Emergencias del Govern balear, Pere Perelló, que ha subrayado que más allá de la recuperación de la normalidad material de la comarca, la prioridad es encontrar al niño, cuya madre es una de las doce víctimas mortales confirmadas de la catástrofe.

"No nos planteamos otra cosa que tirar adelante y buscar donde no hemos buscado, o volver a repasar lo que hemos mirado ya", ha recalcado.
Los reyes, que ya visitaron el viernes Sant Llorenç para mostrar su solidaridad con las víctimas, asistirán al funeral que se celebrará en Manacor el próximo miércoles a las 19:00 horas, según han informado hoy fuentes de la casa del rey.

El Govern balear, en colaboración con los ayuntamientos de la comarca y el Consell de Mallorca, ultima la evaluación de daños para aprobar a partir de esta semana seis líneas de ayudas para las personas afectadas por la torrentada, aportaciones autonómicas que serán compatibles con las subvenciones estatales y los seguros.

La portavoz del ejecutivo regional, Pilar Costa, ha explicado que el Govern celebrará en los próximos días una reunión extraordinaria en la que aprobará o iniciará los trámites para poner en marcha ayudas para los familiares de fallecidos, los propietarios de coches dañados, los dueños de viviendas anegadas, los empresarios y comerciantes, los agricultores y los vecinos con necesidades sociales urgentes a consecuencia de la riada del martes.

Costa ha hecho este anuncio después de participar en un reunión a la que han asistido la presidenta del Govern, Francina Armengol; la delegada del Gobierno, Rosario Sánchez; el presidente del Consell de Mallorca, Miquel Ensenyat; y los alcaldes de Sant Llorenç, Mateu Puigròs; Artà, Manolo Galán; Capdepera, Rafel Fernández; Manacor, Catalina Riera, y Son Servera, Antoni Servera.

La portavoz del Govern ha eludido cifrar la cuantía de los daños subvencionables porque los técnicos todavía están recogiendo datos, pero ha hecho hincapié en que serán "compatibles y complementarias" con las aportaciones estatales, que se aprobarán en el Consejo de Ministros del viernes, y las de aseguradoras privadas.

La presidenta Armengol ha anunciado además que se han puesto hoy a disposición de familias de Sant Llorenç cuyas casas han quedado inhabitables seis viviendas de titularidad pública en cuatro municipios cercanos.

Armengol ha informado de esta medida tras mantener en un local municipal de Sant Llorenç una reunión con representantes de los colegios profesionales de arquitectos y aparejadores en la que se ha acordado establecer desde mañana en el pueblo una oficina técnica que evaluará los daños en las estructuras de viviendas e infraestructuras públicas.

Esta mañana han vuelto a las clases unos 1.500 alumnos de los cuatro colegios de la zona que permanecieron cerrados la semana pasada tras las catastróficas lluvias torrenciales, unos estudiantes que, junto a sus familias y los profesores, cuentan con la asistencia de un equipo de psicólogos que les ayudan a afrontar el trauma de la riada.