BAGDAD.- Al menos once bebés, que habían nacido prematuramente y que se encontraban en incubadoras, han muerto este miércoles a causa de un incendio en un hospital del oeste de Bagdad, según el Ministerio de Sanidad iraquí.

El portavoz de Sanidad del país, Ahmed al Radini, ha explicado en declaraciones a la prensa que pudieron ser evacuados del Hospital Al Yarmuk siete bebés y 29 mujeres.

Según ha explicado una fuente policial, que ha elevado a una veintena la cifra de bebés fallecidos, el humo se propagó por el centro y llegó a la sala de incubadoras del área de maternidad.

Los primeros informes apuntan a que el fuego, que provocó grandes destrozos, se ha debido a un cortocircuito en el vestíbulo del hospital. No obstante, las autoridades han formado una comisión para investigar las causas del incendio y esclarecer si fue accidental o intencionado.

Sin embargo, fotos publicadas días atrás en las redes sociales mostraban el lugar en un estado de abandono, con cucarachas arrastrándose entre las baldosas rotas , cubos de basura rebosantes de desperdicios, baños sucios y los pacientes en camillas tumbados en el patio, por lo que, ante esta situación, el fallo eléctrico como causa ha cobrado fuerza.

Los bomberos tardaron tres horas en apagar el fuego del hospital, uno de los más importantes en el este de la capital, con servicios de emergencias que muchos otro carecen. Sin embargo, la madre de uno de los bebés, Shaima Yarmuk, ha declarado que no se le ha permitido rescatar a su hijo recién nacido. "Llegué con el biberón de leche para él, y entonces todo esto pasó...cortaron la electricirar y cerraron las puertas" ha dicho.

Hassan Omar, otro padre, ha dicho estar realmente decepcionado con el hospital, quien se ha negado a aportar información sobre sus gemelos, de los que desconoce su paradero.